Antes de que arranque la Operación Paso del Estrecho estarán ya totalmente terminadas las obras del nuevo acceso desde la N-340 hasta el Puerto de Almería, al menos el tramo que permitirá a los pasajeros entrar directamente sin necesidad de llegar hasta la rotonda de Pescadería descongestionando así mucho el tráfico viario de la zona. Así lo anunciaban la presidenta de la Autoridad Portuaria de Almería, Rosario Soto, como la alcaldesa de la capital, María del Mar Vázquez, en la visita que han realizado a los trabajos que están ahora mismo en ejecución.

Unos trabajos que para la alcaldesa de la capital son “fundamentales para descongestionar y agilizar el tráfico de entrada en nuestra ciudad para los almeriense y para los visitantes” y en los que se han invertido 2,8 millones de euros. “Hemos resuelto este problema histórico”, decía por su parte Rosario Soto quien agradece, además, la colaboración municipal.

Pero esta actuación no es más que el final de unos trabajos que deben unir a través de un ramal exclusivo la autovía A7 con las instalaciones portuarias. Este vial debe realizarlo el Gobierno central y en estos momentos se encuentra en plena redacción del proyecto. Explica la presidenta de la Autoridad Portuaria que “hace unos días” estuvieron hablando con la Dirección General de Carreteras y “previsión de convocar la comisión en la que está el Ayuntamiento de Almería, la Autoridad Portuaria, la Demarcación de Carreteras y el Ministerio también” para analizar el ritmo y los avances del proyecto. “Tenemos que tener la confianza en las administraciones públicas y en que estamos todos concienciados en la necesidad de ese acceso directo desde la A7 al puerto que será la solución definitiva para la descongestión de vehículos pesados”.

 En esta visita, también se realizó un recorrido por los trabajos que hay actualmente en marcha en el edificio del Varadero y que está previsto que estén totalmente culminados en el mes de mayo. 

Unas obras que han permitido una rehabilitación total del exterior del inmueble, que en el interior ha supuesto la mejora de las techumbres, un cambio de orientación del escenario, el prepararlo todo en materia de iluminación, apartado digital y sonido para la celebración de eventos, e incluso se ha dejado al aire una muestra de la composición de esos muros. Ahora toca aprobar la normativa para la gestión del uso del inmueble.