Un amigo me muestra dos fotos publicadas en La Voz de Almería esta misma semana. En una, los representantes de la Comisión Provincial de Patrimonio histórico. Miro esa foto y mi primera impresión es la de estar viendo, vulgarmente hablando: "un campo de nabos".

Todo son señores. ¿Dónde ESTÁN ELLAS? La otra foto es la de una acción reivindicativa de políticos y empresarios para buscar un tren rápido y efectivo que conecte a Almería y aparecen los chicos con los chicos y las chicas con las chicas. Por supuestos las chicas esquinadas y en los bordes, la centralidad es para ellos. Observo que en esa foto está la máxima autoridad de nuestra ciudad, la señora alcaldesa y me pregunto que les pasa a los señores que se colocan en el centro y que yo presupongo que a empujones, dándose codazos.

Y lo presupongo porque hace años conocí la vida política representativa, y juro por la diosa venus, que los señores daban codazos para colocarse ante la cámara. En fin.  Como soy una temeraria, me permito decirle a la señora alcaldesa que se empodere más y que asuma su máximo papel, que a las mujeres nos gusta ver a las mujeres que tienen poder y que tienen liderazgo y responsabilidad pública y que yo prefiero verla a ella antes que a su antecesor, el hoy señor consejero "del color azul" tieso para parecer más alto, con el pecho henchido de orgullo que no cabe en el traje.

Que ver a mujeres en los ámbitos de representación es fundamental. ¡Ya está bien de estereotipos!. En Almería hay restauradoras, arquitectas, historiadoras del arte, empresarias, trabajadoras, emprendedoras y mujeres preparadas para estar en esos foros y en esas fotos. así que vayan haciéndose a un lado los caballeros de la mesa redonda y del senado romano. En la serie de Dragon Ball, solo jugaba Son Goku y sus amigos, y esa serie, felizmente ya está obsoleta.