Había ganas de fútbol, de goles, de ver a Cristiano Ronaldo y por supuesto, al Almería. No defraudó el choque contra el Al-Nassr porque hubo espectáculo de goles -dos del portugués con su particular celebración- y momento de gran fútbol por parte del equipo de Rubi. Puesta en escena positiva para la temporada con todos los focos apuntando a CR7, que jugó la primera mitad. 

En cuanto a la grada, no hubo lleno, pero sí volvió a casa el presidente Mohammed Al-Khereiji, así como la actuación en el descanso del almeriense RVFV. Un amistoso por todo lo alto con visos de mantenerse en el tiempo por la magnífica relación del mandatario del Almería con los árabes. A pesar de los problemas en los accesos con los códigos QR, ya que hubo gente que entró más de 20 minutos tarde, la fiesta del fútbol fue redonda. Hubo muchos goles, Cristiano marcó y celebró como los más pequeños querían y al final ganó el Almería.