La Albufera de Adra, no es solo un humedal: es un auténtico refugio de biodiversidad, único en la provincia de Almería y entre los más singulares de Andalucía y del sureste peninsular. Este enclave, incluido en la Red Natura 2000 y protegido por normativas internacionales como el Convenio Ramsar, alberga hábitats escasos y valiosísimos, así como especies de fauna y flora que difícilmente pueden encontrarse en otros puntos del país, entre ellas el fartet (Aphanius iberus), la ranita meridional (Hyla meridionalis) o la malvasía cabeciblanca (Oxyura leucocephala), todas en peligro o con diversos grados de amenaza.

En un entorno intensamente transformado por la agricultura intensiva, estas albuferas —la Honda y la Nueva— actúan como un oasis ecológico, un pulmón verde y un reservorio natural de vida. Sin embargo, la presión humana, la degradación del hábitat y fenómenos como la eutrofización y la salinización han puesto en riesgo este ecosistema único.

Consciente de esta realidad, la Junta de Andalucía ha iniciado una intervención integral para garantizar su conservación y restauración ecológica. La consejera de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Catalina García, acompañada por el alcalde de Adra, Manuel Cortés, ha visitado este lunes las actuaciones urgentes que se están ejecutando en la Albufera. La inversión alcanza los 997.673 euros, y supone un paso firme del Gobierno andaluz en su compromiso con la preservación de este enclave natural estratégico.

Restauración ecológica y protección de la fauna

Durante la visita, Catalina García ha destacado “el enorme valor ecológico de las Albuferas de Adra, auténtico pulmón natural y refugio de biodiversidad”, y ha señalado que “las actuaciones que estamos desarrollando permitirán recuperar antiguos terrenos agrícolas para integrarlos en el ecosistema húmedo, mejorar los equipamientos públicos para la observación de aves y reforzar el vallado que protege la fauna frente a depredadores”.

El proyecto contempla la rehabilitación ambiental de 3,7 hectáreas distribuidas entre seis parcelas de titularidad pública, próximas a las albuferas Honda y Nueva. Estos suelos, antaño utilizados con fines agrícolas, están siendo restaurados mediante la eliminación de especies vegetales invasoras, la retirada de áridos, la creación de refugios para fauna y áreas de inundación, facilitando su integración en el ecosistema palustre.

Infraestructuras científicas y turísticas renovadas

Además de la restauración del entorno natural, se están acometiendo mejoras significativas en los equipamientos públicos de uso científico y recreativo. Se están renovando por completo las torretas-observatorio de las albuferas Nueva y Honda, la caseta de la estación ornitológica Lorenzo García y el observatorio de la Torreta de Biodiversidad, que contará también con cajas nido para aves insectívoras y polinizadores. Estas mejoras no solo refuerzan la funcionalidad científica del humedal, sino que potencian su atractivo para el turismo de naturaleza responsable.

Uno de los elementos clave del proyecto es la renovación del vallado perimetral, muy deteriorado por la humedad y la salinidad, cuya mejora evitará la entrada de depredadores como jabalíes, perros o gatos. Este refuerzo es esencial para la protección de las especies más vulnerables, como el fartet, la ranita meridional o la malvasía cabeciblanca, todas incluidas en los catálogos de especies amenazadas.

Una joya ecológica reconocida internacionalmente

La Albufera de Adra ostenta una elevada protección ambiental, no solo por su declaración como Reserva Natural en 1989, sino también por su inclusión en la Lista de Humedales de Importancia Internacional (Convenio Ramsar) desde 1994. Además, ha sido designada como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), Zona de Especial Conservación (ZEC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), todas figuras vinculadas a las directivas europeas de hábitats y aves. Estas designaciones la posicionan como un enclave estratégico en la Red Ecológica Europea Natura 2000.

García ha querido subrayar que “no estamos ante un espacio abandonado, sino ante un ejemplo de actuación planificada, responsable y comprometida”. Además, ha destacado que abordar los desafíos de este humedal —como la calidad del agua o el equilibrio salino— requiere una visión integral y la colaboración de administraciones, científicos, agricultores y ciudadanía.

Más de 51 millones para sostenibilidad en Almería en 2025

La consejera ha anunciado que el presupuesto de su Consejería para la provincia de Almería en 2025 será de 51,8 millones de euros, “una cifra que demuestra el compromiso real del Gobierno andaluz con el desarrollo sostenible, la conservación de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático”.

El alcalde de Adra, Manuel Cortés, ha agradecido la implicación de la Junta y ha recordado que “este humedal es un tesoro natural que no solo enriquece la biodiversidad, sino que mitiga los efectos del cambio climático, contribuye al abastecimiento de agua y atesora valores ecológicos, culturales e históricos únicos”. Cortés ha afirmado que “en Adra tenemos la suerte de contar con este rincón tan singular, y es nuestra obligación protegerlo”.

Otras inversiones medioambientales en Adra

Además del proyecto en la Albufera, la Junta está llevando a cabo otras actuaciones destacadas en el municipio en materia de conservación, residuos y mejora de infraestructuras rurales:

35.822 euros para la mejora del firme y la señalización de las vías pecuarias “Colada de la Marina” y “Colada de las Hoyas del Barranco”.

Finalización en septiembre de 2023 del nuevo Punto Limpio de Adra, con una inversión de 621.398 euros. Además ,también se han invertido 75.828 euros de subvención al Ayuntamiento para la implantación de la recogida selectiva de biorresiduos domésticos.

El Consorcio de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos del Poniente Almeriense, del que Adra forma parte, ha recibido más de 7,1 millones de euros para distintas mejoras:

Así mismo se ha invertido 1.049.430 euros para tratamiento específico de biorresiduos; 4 millones de euros para la mejora de plantas de tratamiento mecánico-biológico; 715.911 euros para una nave de compostaje y 1.434.466 euros para la clasificación automatizada del vidrio.

Estas inversiones, según García, “demuestran que el compromiso del Gobierno andaluz con la sostenibilidad en Adra es real y se traduce en hechos: mejora ambiental, calidad de vida y economía circular”.

Durante el recorrido por las actuaciones en la Albufera, la consejera estuvo acompañada por el viceconsejero de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Sergio Arjona; la delegada del Gobierno en Almería, Aránzazu Martín; el director general de Espacios Naturales Protegidos, José Enrique Borrallo; y el delegado territorial Manuel de la Torre, entre otras autoridades.