Almeriacine y el “eterno debate” de los decorados

La rápida desaparición de los decorados de la serie francesa ‘Zorro’, que ha traído hasta Almería durante cinco semanas al oscarizado actor francés Jean Dujardin, ha llevado al colectivo Almeriacine a publicar en su blog el artículo ‘Decorados efímeros y turismo de cine, el eterno debate’. En él hablan de la “fuerte oposición” entre “cinéfilos y aficionados al turismo de cine” por el rápido desmantelamiento y se plantean certeras preguntas.

“¿Beneficia en algo a los propietarios la conservación de los decorados? ¿Quién soportaría los supuestos gastos de conservación y vigilancia? ¿Quién sería responsable de daños o accidentes que hipotéticamente sufrieran los visitantes de los decorados? Y en el ámbito institucional, ¿obtendría algún beneficio por las visitas el municipio [Pechina] en el que están enclavados los decorados? ¿Quién regularía y controlaría el acceso a la finca -privada-?”, reflexionan.

El volumen y altura de los decorados de ‘Zorro’ en El Chorrillo los hacen “proclives” al deterioro por agentes meteorológicos. Y si bien pueden atraer a personas “cinéfilas o no, amantes del turismo de cine o no” también pueden ser imán de vándalos, lo que haría de este espacio un “lugar seguramente peligroso”.

Otros casos
Asimismo citan otros decorados de cine ya perdidos o en estado ruinoso (los poblados Mimbrero y Nueva Frontera, la fortaleza El Cóndor) que no corrieron la suerte de tres poblados del Oeste de Tabernas (Oasys-MiniHollywood, Fort Bravo y Western Leone) construidos para la gran pantalla y que siguen abiertos al público e incluso albergando rodajes.

El texto habla además del “modélico ejemplo” del gueto construido, también en El Chorrillo, para ‘Exodus’, que no se tiró y ha sido reutilizado ya para otras producciones, de ‘Juego de tronos’ a la reciente ‘Camino a Belén’. ¿Por qué no algo así con los de ‘Zorro’? “Sencillamente, porque nadie nos puede garantizar que antes de que las paredes del ayuntamiento o del casino empezaran a amenazar con caerse -o caerle encima a alguien- vaya a venir algún nuevo rodaje al que le interesen, que los utilice como están o modificados”, apuntan.

Como remedio intermedio plantean un “intento de convenio temporal” entre la Diputación y los dueños de la finca (que, recuerdan, está en venta) “para hacerse cargo del acceso y vigilancia” durante unas semanas y así permitir la “contemplación” de los decorados por los aficionados. ¿Solución temporal y después el inevitable derribo? Mejor eso que nada”, concluyen.