Objetivo 2027 para este nuevo Parque Arqueológico almeriense

Tan importantes son en la arqueología y puesta en valor del patrimonio tanto los nuevos hallazgos como aquellos descubrimientos que cambian radicalmente lo que creíamos saber acerca de una estructura o de un simple elemento decorativo.

Es lo que está ocurriendo (entre otras muchas cosas) en la nueva excavación que se está realizando en el cerro del Espíritu Santo de Vera, donde se asentaba la antigua Bayra, la Vera medieval. Por lo pronto, el equipo dirigido por Moisés Alonso, investigador de la Universidad de Granada y director del proyecto de investigación ‘Bayra’, trabaja actualmente en la zona que “presumiblemente se correspondía con una torre” pero que tras los trabajos resulta que “quizás no lo era” por lo que “probablemente estemos ante uno o varios aljibes, depósitos tan habituales para almacenar este recurso tan necesario” para almacenar un buen escaso como es el agua.

A falta de terminar los trabajos que cierren esta conclusión, también llama la atención “el gran número de silos” de almacenamiento que se están encontrando en las viviendas. “Se puede ver que en la edad media teníamos silos en esta zona pero los que se están recuperando aquí son muy importantes en número pero además tienen una entidad enorme, algunos con casi cuatro metros de profundidad”. Esto, por supuesto, denota la relevancia que tenía entonces la población de Bayra. En la misma excavación, que se prolongará hasta el 4 de julio.

Pero esa torre que puede no ser tal no es el único elemento que, al parecer, no es lo que se pensaba. “Estamos recuperando un paño de muralla muy importante que se pensaba, antes de la excavación, que podía ser uno de los accesos a la zona amurallada pero parece ser que no; que la muralla continuaba por otro lado y no es la zona de acceso. En futuras campañas buscaremos esa zona de acceso en zonas aledañas”, adelanta Alonso acerca de esos trabajos que se reanudarán el 27 de agosto una vez que finalice la campaña que está en marcha.

Unos trabajos que son la continuación de la primera campaña finalizada tiempo atrás y que suponen el punto de partida para la creación de todo un Parque Arqueológico Bayra. La apuesta del Ayuntamiento veratense es tal, que incluso ha creado una concejalía con ese nombre. Su edil y teniente de alcalde, Carola Pérez, explica que “con esta apuesta se demuestra la intención de este equipo de Gobierno de Vera que ya ha apostado muy fuerte en los últimos años por el cerro del Espíritu Santo, que queremos que sea todo un Parque Arqueológico. Se trata de una iniciativa a seis años vista y que se encuentra en el segundo de ellos, por lo que el objetivo es que para 2027 este proyecto sea toda una realidad".

La intrahistoria de Bayra, cómo vivían los antiguos veratenses, también se está recuperando al mismo tiempo que salen a la luz distintos utensilios como hoyas, marmitas, cazuelas, jarras…. Elementos que tienen en común otros muchos asentamientos pero que sin embargo no pueden presumir de ser frontera entre dos épocas históricas. Y es que la mayor parte de los hallazgos se sitúan en una horquilla de 30 años, los que pasaron desde la llegada de los cristianos en 1488 hasta el terremoto que acabó con el asentamiento, en 1518.

Esto está permitiendo obtener las primeras pistas sobre cómo convivían varias culturas o, al menos por el momento, las dos tecnologías a la hora de elaborar ciertas herramientas de las que ya sí que hay constancia. “Estamos viendo dos tradiciones tecnológicas diferentes: la tradición andalusí y una tradición probablemente de origen cristiano y que viene de fuera. Como en determinadas zonas del asentamiento o en determinadas piezas prevalece una tecnología sobre otra”, detalla el responsable de la investigación.

Son algunos de los últimos hallazgos que se ocultaban bajo kilos de tierra en el cerro del Espíritu Santo y que por delante tiene cinco años de trabajo que sacarán a la luz, con total seguridad, muchos más datos y aspectos de la vida en la antigua Bayra de los que hasta ahora se conocían.

Pensando en ese 2027, el investigador anticipa lo que un visitante (pese a que en la actualidad ya se realizan visitas guiadas) encontrará en Bayra. “Lo más importante es que vamos a tener una ciudad medieval reconocible y visitable, porque hasta ahora lo que tenemos es un cerro que había pardido esa memoria histórica de relación de la Bayra medieval con la ciudad actual. Se va a poder recuperar esa relación con áreas arqueológicas visitables repartidos por todo el cerro, tendremos varios sectores: desde el Alcázar en la zona alta hasta la muralla en la zona intermedia, el algibe-ermita en la parte alta o las viviendas en la zona baja”.

Pero más allá de lo arqueológico, quienes en un futuro se acerquen a este parque también se encontrarán con un “parque arqueológico con un nuevo vallado y un centro de recepción de visitantes que para esa fecha ya esté terminado”. Siendo así, todo indica a que 2027 será el año que Vera permita viajar a todo aquel que lo desee cinco siglos atrás en el tiempo.