Los idiomas ganan peso en la educación actual

El avance de las nuevas tecnologías y las comunicaciones han hecho que el mundo avance hacia la conectividad más absoluta. Y, con él, las sociedades modernas, que interactúan cada vez más entre sí en todos los aspectos.

Esto ha hecho fundamental el conocimiento de un segundo e, incluso, un tercer idioma que permita a cada persona comunicarse con el mayor número posible de interlocutores, sin importar su procedencia. De hecho, los idiomas se han convertido en uno de los aspectos más demandados en la educación privada, y esto se ha trasladado a padres, madres y tutores legales a la hora de elegir un centro para sus hijos.

Cada vez más colegios e institutos privados otorgan una importancia crucial a los idiomas, dando buena parte de las asignaturas en una segunda lengua o, incluso, potenciando el uso de una tercera.

El francés y el inglés siguen siendo los idiomas más demandados. En el caso del segundo, además, continúa siendo la lengua oficial a la hora de comunicarse con alguien a nivel internacional, lo que ha hecho que su importancia se mantenga o, en algunos casos, se incremente. Sin embargo, otros idiomas como el alemán, el italiano o el chino se están abriendo paso. En el caso de los países asiáticos, cada vez más presentes en el día a día actual, se antoja cada vez más importante conocer a fondo su historia, cultura y lengua.

Los centros educativos consiguen de muchas formas que la inmersión lingüística sea plena. Una de las más habituales es la de impartir las asignaturas en otro idioma, lo cual no solo hace que el alumno acostumbre el oído, sino que ayuda a los estudiantes a expresarse a nivel oral y escrito en dicho idioma. Pero hay más formas: los programas de intercambio o actividades como campamentos son otra forma de potenciar el uso de una segunda lengua.

La contratación de profesores nativos ayuda también a que este proceso sea más natural y eficaz, siendo una práctica cada vez más extendida en muchos centros educativos.

Estos esfuerzos se traducen en alumnos que finalizan su etapa formativa con un alto nivel en idiomas, y es que está demostrado que, cuanto antes se inculque una segunda lengua, más fácil será para el niño interiorizarla.

Es una buena manera de garantizar que los estudiantes estén preparados para comunicarse con garantías el día de mañana.