Una perra evita que atraquen a punta de cuchillo a su dueña en la Vega de Acá

Un encapuchado trató de robar el móvil anoche a una joven que paseaba a su american stafford

Zona de descampados en la que mucha gente suele sacar a sus perros, entre las calles Regaliz y Bizet.
Zona de descampados en la que mucha gente suele sacar a sus perros, entre las calles Regaliz y Bizet.
Francisco G. Luque
13:30 • 14 dic. 2023

Como cada noche, Cristina iba con su perra tranquilamente por la Vega de Acá, concretamente por la zona en la que se encuentran los descampados que son habilitados a finales de agosto como aparcamientos en la semana de la Feria de Almería. Pero este pasado miércoles, a las 22:30 horas, su sosegado paseo rutinario se vio alterado por un incidente que no llegó a mayores gracias a la reacción protectora del american stafford de esta almeriense de 30 años de edad.



La chica iba hablando por teléfono en un tramo entre las calles Regaliz y Bizet y su perra se paró a olisquear, como es habitual en los canes. De repente, Cristina notó una presencia detrás y al darse la vuelta tenía de frente, a pocos centímetros, a un individuo "vestido entero de negro y con un pasamontañas", según describe. "Me dijo que le diese el teléfono, le dije que no y fue cuando me sacó el cuchillo", detalla la joven que reaccionó gritándole "como una loca, lo más fuerte que pude, para que me escuchara alguien".



Un gran susto



A esa hora, y teniendo en cuenta el fuerte viento que se levantó en la ciudad dicha noche, estos descampados y sus alrededores no tenían el tránsito de personas que sí se puede ver otros días, sobre todo de vecinos que también sacan a pasear a sus mascotas. Así, Cristina se vio sola, en una situación de extremo peligro para su vida, pero afortunadamente todo quedó en un gran susto. “Mi perra notó mi miedo y se puso a ladrar al individuo que intentaba robarme, quería tirarse hacia él, pero la tenía atada”, comenta. Esto provocó que el encapuchado saliera corriendo del lugar, donde una vecina que pasaba en ese momento con otro perro se percató de todo y fue detrás del encapuchado para que no escapara.



"He vuelto a nacer", asegura esta estudiante que mostró una gran fortaleza en una situación que jamás antes había vivido. "Sustos por esa zona sí me había llevado antes, a lo mejor por notar que me perseguían y cosas así, pero nunca me habían llegado a amenazar y a sacarme un cuchillo", reconoce esta chica que siempre saca a su perra por allí y "se suele ver a la policía a menudo, pero justo esa noche no pasó ningún coche". En esta ocasión, cree que el individuo podía haber estado siguiéndola con cautela, "porque yo soy de las que va mirando por todos lados y no lo vi venir".






"Espero que no me deje ningún trauma"



Prefiere no hacer público su nombre completo, pero sí que ha publicado en sus perfiles de redes sociales lo ocurrido para poner en alerta a sus amigas. "No busco dar pena ni nada, solamente quiero informar porque esto le puede pasar a cualquiera". Por suerte, Cristina no fue agredida y pudo conservar su celular, pero sufrió un ataque de ansiedad tras vivir este lamentable suceso que espera "que no me deje ningún trauma" y pueda seguir sacando por la noche a su perra, cuya reacción fue clave para evitar lo que podía haber sido una desgracia.


"Me da muchísima impotencia no poder ir tranquila por la calle, a la hora que me apetezca", afirma la almeriense, que después de lo que le ha ocurrido aprovecha para aconsejar a otras mujeres que intenten "no salir solas", aunque desea que el miedo que experimentó este miércoles no le cree "paranoia y desconfianza al salir de noche".


La importancia de denunciar los hechos

Al no tener pruebas de lo ocurrido porque no llegó a sufrir el robo ni lesiones, y además no había testigos, dudó en un primer momento si poner una denuncia. Sin embargo, con el paso de las horas y tras recibir el consejo de su entorno, considera que "es mejor informar a la Policía" para que se tomen medidas y evitar que este individuo que le dio el susto de su vida pueda asaltar a otras personas.


Pese a que siempre se suele hablar mal de los american stafford, con una crianza correcta se trata de un perro sociable y amigable por naturaleza, y en este caso además tuvo un comportamiento protector ejemplar que impidió que fuese asaltada su dueña, una joven estudiante de la Universidad de Almería que nunca imaginó que tras acabar sus clases ayer tuviese que plantearse ir a una comisaría esta semana para dar parte de este grave incidente que le hizo regresar el miércoles a casa en shock.


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