Nuevo ataque a la placa homenaje a La Veneno en Madrid

La placa dedicada a la artista Cristina Ortiz, La Veneno, en el parque del Oeste ha vuelto a ser vandalizada, lo que ha llevado al portavoz adjunto de Más Madrid en el Ayuntamiento, Eduardo Fernández Rubiño, ha adelantar que volverán a pedir al Consistorio su reposición, “como las cuatro o cinco veces anteriores”.

“La placa que conmemora a Cristina Ortiz, La Veneno, en el parque del Oeste, ha vuelto a ser vandalizada. Vamos a pedir su inmediata reposición al Ayuntamiento de Madrid, como en las cuatro o cinco veces anteriores que los matones la atacaron”, ha escrito Rubiño en su cuenta en la red social X.

El homenaje

Este homenaje, en el que se puede leer ´En memoria de Cristina Ortiz, La Veneno, mujer transexual visible en los años 90´, ha sufrido constantes ataques. 

Tanto es así que la Junta de Moncloa-Aravaca decidió protegerla con una plancha de material transparente que resistiera mejor a posibles actos de vandalismo.

“Quiero que esparzan mis cenizas en el Parque del Oeste, donde fui una puta feliz”, había confesado en más de una ocasión Cristina Ortiz, ‘La Veneno’, a su biógrafa y amiga Valeria Vegas, autora de sus memorias ‘¡Digo! Ni puta ni santa’. Fue por ese motivo que, en 2019, fue instalada una placa que  a la semana fue arrancada y que regresó en 2020. La última vez, en mayo de 2023, la placa homenaje a La Veneno fue vandalizada siendo tapada con pegatinas de Franco. 

En aquella ocasión, fue la política y número 5 de la candidatura de Más Madrid a la Comunidad de Madrid, Carla Antonelli, quien afeaba este ataque a través de un fotografía.

“La España donde día sí y el otro también nos señalan con el dedo, la que en el último año aumentaron más de un 67% las agresiones LGTBIfóbicas y en especial las transfóbicas, el odio no se vocifera solo en los estadios también lo hacen líderes políticos de la extrema derecha desde altavoces públicos y canales oficiales”, expresaba Antonelli.

Cristina Ortiz dio visibilidad a las personas trans. Falleció en 2016 tras pasar cuatro días en coma en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital La Paz de Madrid, donde llegó después de ser encontrada en su casa con un golpe en la cabeza.