Aprobados y suspensos en el debut de Rubi

Makaridze (3). En la primera mitad salió bien librado de una parada de riesgo. Salió en menos ocasiones que en otros partidos y dio la sensación de poder hacer más en ambos tantos. Casi se puede decir que fue batido en los dos únicos disparos de riesgo del rival en el Mediterráneo.

Buñuel (3). Irregular actuación del lateral. En algunas acciones llegó bien a la zona de tres cuartos rival, pero culminado siempre mal. De un error suyo llegó el tanto del empate del Oviedo al perder un balón, hacer falta y llegar del lanzamiento de la misma el 2-2.

Cuenca (4). Era de los pocos futbolistas que había mantenido el tipo a lo largo de la temporada, pero frente al Oviedo tuvo su noche más negra. Sirvió en bandeja un balón a Obeng para que éste hiciera el 2-1. Cometió varios errores en al salida de balón y estuvo menos seguro de lo habitual. El central rojiblanco provocó un penalti.

Maras (7). Fue el defensor que mejor mantuvo el tipo. Firme en la marca no se complicó nunca la vida. Sobrio, pero seguro.

Akieme (7).  Una vez más fue uno de más firmes estiletes ofensivos del equipo. Interviniendo en muchos de los ataques de los suyos. Asistió a Umar Sadiq en el segundo gol y a Fran Villalba en la segunda mitad.

Morlanes (6). Fue de más menos. Completó una buena primera mitad en perfecta armonía con Radosav Petrovic. En l asegunda bajó, dando la sensación de que anda escaso de gasolina.

Petrovic (6). Probablemente el jugador que movió el balón con mayor clarividencia ante el Oviedo, filtrando balones entre las líneas enemigas. Como su compañero en la linea de dos, bajó sus aportaciones.

Corpas (3). Puso toda la carne en el asador, pero estuvo especialmente desacertado. Primero fallando un penalti que lanzo abajo y mal, después enviando al muñeco un mano a mano con el meta rival. Buena asistencia a Umar Sadiq.

Carvalho (3). Dicen, y debe ser verdad, que es un futbolista de gran calidad. Al equipo aportó poco o nada.

Lazo (6). En la primera mitad se movió bien a los espacios y fue importante en las acciones de ataque. Fue a menos. Otra vez los tres escoltas de Umar Sadiq fueron cambiados.

Sadiq (9). Marcó dos goles, el segundo genial ante el Real Oviedo, que fueron insuficientes por los errores de sus compañeros. Acumula 18 dianas. Es el jugador más desequilibrante del plantel rojiblanco.