Terque

Reparto de 898 parras de 24 variedades de uva entre particulares e instituciones

Se han repartido entre pueblos de Almería y también en Zaragoza, Albacete, Murcia y Granada

Tres niñas con tres ejemplares.
Tres niñas con tres ejemplares.
La Voz
11:39 • 18 ene. 2016

El pasado domingo en Terque se repartieron los últimos pies de los 898 parras de 24 variedades de uva de mesa. Esta es la novena edición de esta iniciativa, que como las anteriores se encarga de organizar el Museo Provincial de la Uva del Barco de Terque, el Grupo Ecologista Mediterráneo (GEM) y el Ayuntamiento de Terque.




Las parras fueron recogidas por particulares de 28 pueblos de la provincia de Almería, y ayer salieron también 24 pedidos de 15 provincias españolas, como, Zaragoza, Albacete, Murcia, Granada, Madrid, Alicante o Valladolid.




También recogieron parras viveros particulares de Sevilla e instituciones públicas como el Jardín Botánico del Rodalquilar o el Ayuntamiento de Tijola.




Este año se repartirán 898 pies de parras injertados de  24 variedades diferentes de parral.




Finalidad
El objetivo del programa es la difusión de estas variedades entre parraleros, particulares e instituciones interesadas en su conservación. En nueve campañas consecutivas se han repartido más de 9000 parras de las distintas variedades, dentro y fuera de la provincia, como la Ohanes, Del Cuerno, Lorita, Flor de Baladre, Cuerno de Buey,  Corazón de Cabrito, Imperial Roja, Corinto, Durilla, De Pan, Valenci o Casta de Beires, entre otras.




Se consideran uvas históricas de la provincia aquellas que se han cultivado desde generaciones en las tierras de la provincia almeriense, muchas de las  cuales aparecen citadas en los documentos comerciales de exportación y en los libros publicados sobre la uva de Almería. 




46 variedades
El centro neurálgico del programa es el parral del Museo Provincial de la Uva del Barco del municipio de Terque, donde se conservan un total de 46 variedades históricas diferentes de uva de mesa de Almería, que hoy, se puede afirmar, han sido salvadas de su posible desaparición gracias a la colaboración de parraleros de toda la provincia y al trabajo incansable de Antonio Rubio Casanova y del Grupo Ecologista Mediterráneo (GEM).





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