El Ejido

La protección y puesta en valor de la Torre de Cerrillos está un paso más cerca

El Ejido y Roquetas se hacen con la titularidad del terreno y asumen el proceso de restauración

La torre de Cerrillos en una imagen de archivo.
La torre de Cerrillos en una imagen de archivo. La Voz
Fran García
18:08 • 12 abr. 2022

La rehabilitación y puesta en valor de la Torre de Cerrillos está un paso más cerca de ser una realidad después de la aprobación realizada este lunes en el pleno del Ayuntamiento de El Ejido mediante la que se ha dado luz verde a la cesión del 50% de la titularidad de la propiedad del lugar donde se encuentra enclavada al Ayuntamiento de Roquetas.



Se trata, por tanto, del penúltimo paso, Roquetas tiene que aprobar en pleno la aceptación de esta cesión, antes de que ambos consistorios puedan ponerse manos a la obra para desarrollar el proyecto de conservación y puesta en valor de este elemento patrimonial en virtud del convenio firmado por ambos a finales del año 2018.



“Desde que firmamos el convenio, el proceso ha estado minado de dificultades y obstáculos que no esperábamos con tanta intensidad”, expresaba ante el plenario ejidense la edil de Cultura, Julia Ibáñez. Y lo hacía refiriéndose al hecho de la aparición de unos propietarios del terreno con los que se ha venido produciendo un ‘tira y afloja’ que ha concluido con la cesión de esa parcela y este definitivo paso anunciado de que la titularidad sea compartida entre El Ejido y Roquetas.



Y es que, en este sentido, cabe resaltar que la torre se encuentra en un lugar en el que ejerce como hito que marca la linde de ambos municipios. Al tiempo que también se encuentra en un enclave en el que cualquier paso que se siga dando debe contar con el beneplácito de Medio Ambiente y Costas. Sin obviar, evidentemente, a la consejería de Cultura.



En cualquier caso, el primer e importante escollo a resolver era el de la titularidad y ese paso está casi zanjado a la espera de la ratificación en el plenario roquetero. “Las dificultades para obtener la titularidad del monumento en régimen de condominio entre los dos ayuntamientos, algo que era un paso previo fundamental y necesario para poder realizar actuaciones previstas en el convenio, han sido superadas. Así que el horizonte se nos despeja notablemente”, asegura Ibáñez.



Compromiso



Una vez despejado el camino de la titularidad, tanto El Ejido como Roquetas de Mar asumen la responsabilidad de hacerse cargo del cuidado y puesta en valor de la torre. “A través del convenio suscito por los dos ayuntamientos y con la consecución de la titularidad de la torre y de los terrenos adyacentes, ambos ayuntamientos nos adjudicamos de manera consciente la responsabilidad sobre el monumento”, ha sentenciado con rotundidad la edil de Cultura ejidense.



Y esto último es un asunto importante puesto que el hecho de no contar con la titularidad de los terrenos ha sido lo que ha impedido que haya podido llevarse a cabo ningún tipo de acción de conservación hasta el momento. Circunstancia que debe cambiar de ahora en adelante.


En este sentido, el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, también ha puesto de relieve la “buena sintonía” con la Junta de Andalucía para realizar las actuaciones que sean necesarias.


¿Apuntalar o intervenir?

Una de las disyuntivas que se pone ahora mismo sobre la mesa, dado el mal estado de conservación del inmueble, es si se realiza una intervención de urgencia para apuntalar los elementos en estado más crítico y luego proceder a la restauración o licitar directamente los contratos que afectan directamente a la restauración.


En cualquier caso, Julia Ibáñez ha dejado claro que los departamentos de Cultura de El Ejido y Roquetas de Mar “están trabajando de forma conjunta” y que la decisión que se tome “responderá exclusivamente a criterios técnicos”.


No obstante, se tome la decisión que se tome, lo que sí parece claro es que está un poco más cerca el momento de que se inicien los trabajos para mantener en pie y rehabilitar esta torre vigía del siglo XVI, recogida como elemento patrimonial por el Estado desde 1993, catalogada como BIC por parte de la Junta y protegida integralmente en el PGOU de El Ejido dentro de su Carta arqueológica.


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