Los cazadores piden que no se prohíba la caza de la tórtola como plantea la UE

La Comisión Europea ha aprobado un plan de acción para la recuperación de la especie que incluye medidas de mejora para frenar su principal amenaza, la destrucción del hábitat, y una moratoria de su caza hasta que se recupere el número de ejemplares. El plan, que ha contado con el respaldo del Gobierno español, indica que esta medida es “esencial” y que debe ponerse en marcha de inmediato. La tórtola europea se ha visto diezmada por la pérdida de hábitat y la presión cinegética en los países que todavía permiten su caza, como en el caso de España.

La reacción a esta medida por parte de los cazadores  no se ha hecho esperar y solicitan que no se aplique, calificándola de “sinsentido”  y sin rigor científico y asegurando que “no mejoraría la situación de la especie”.  

En cualquier caso, los datos son preocupantes. Según la Sociedad Española de Ornitología (SEO), su población ha caído en España un 25% desde 1998. De hecho, hace solo dos años y medio fue incluida en la Lista Roja de Especies Amenazadas con la categoría de vulnerable. Además, al ser una variedad migratoria, las poblaciones del norte de Europa se han desplomado hasta un 40% -incluso un 70%, según algunos estudios- por las pérdidas en los estados donde aún es legal su abatimiento.

La SEO calcula que cada temporada se matan unos 700.000 ejemplares de tórtola europea en España.  Una cantidad que casi se ha doblado respecto a las capturas realizadas en 2009.

El Plan europeo pide que se cree una regulación de caza que se adapte y permita una gestión sostenible basada en la demografía de la especie, las poblaciones existentes y que prohíba la caza en la época de cría y también en la prenupcial, así como que se refuerce la persecución de las infracciones y las sanciones.

La Federación Andaluza de Caza (FAC) asegura que la moratoria “no está basa en ningún estudio científico”. Según la FAC, allí donde se han aplicado moratorias de este tipo no se ha producido ninguna recuperación del censo de la especie afectada. Además, recalcan que, en el caso de la tórtola, es aún más evidente, “dado que todos los expertos coinciden en que los problemas de esta especie se derivan, principalmente, de los efectos de determinados usos agrarios sobre sus ecosistemas, por lo que es ahí donde deberían incidir las medidas a adoptar”.

Valentía

La Federación pide al Gobierno Andaluz que “actúe con valentía” y, dado que, según aseguran, “el plan de acción no es vinculante ni tiene carácter legislativo” no lo ponga en marcha. La FAC considera necesario que la Junta abra “un diálogo constructivo y realista” con todos los sectores implicados para consensuar las medidas que sean necesarias para mejorar la situación de la tórtola.

Una posición opuesta a la de la SEO, cuya directora, Asunción Ruiz, insiste en que con el Plan “no nos podemos quedar en el papel. Ahora toca aplicarlo por el bien de la tórtola y del campo”.