Esta fue la primera marca almeriense en aparecer en la tele en blanco y negro

Tulipán negro es la marca registrada almeriense, aún en el mercado, que primero apareció en un anuncio de televisión hace más de 40 años. Es el buque insignia, el jugador franquicia de Briseis, la compañía de productos de higiene personal con sede en Benahadux que celebra  su 75 aniversario desde que el perfumero Antonio López Jiménez la constituyó en 1948. No obstante, este emprendedor, nacido en 1909, hijo de un carnicero del Mercado Central, ya había iniciado sus actividades en 1932 con un pequeño local alquilado en el Paseo con la fabricación de colonias de tipo floral como Galán de Noche o Heno Briseis. Hoy día Briseis, en tercera generación factura unos 12 millones de euros y exporta más del 80% de su producción a países como Suecia, Marruecos, Andorra o Bélgica. Busca también abrirse paso en el competitivo mercado árabe y recientemente ha participado en Emiratos Árabes en la mayor feria del sector denominada Beautyworld Middle East.

Tulipán negro, el principal reclamo de la compañía, cuenta con un largo recorrido ya que lleva en el mercado desde 1953. Briseis fabrica y distribuye productos de higiene y cuidado personal, como desodorantes, geles colonias, champús, y de perfumería. Entre sus marcas destacan también Autolift, Firdrak, Farina, Ragatza, Bel Air, Clear Water, Claire, Inquietude, Bel Amour, Iles de Reve o Cruise.

La actividad de la empresa no paró de ampliarse se abriendo un pequeña fábrica en Málaga y produciendo marca blanca para otras empresas. Hacia 1945, se construyó una fábrica de gran extensión en la capital almeriense, en la plaza de Barcelona, muy cercana a la estación ferroviaria y comenzó la extracción de aceites esenciales de limón, de los que fueron pioneros.

La expansión nacional de la empresa se produce con la apertura de varias fábricas en España y de la nueva fábrica en Benahadux (Almería), en 1987, con una superficie de más de 30.000 metros.

La fábrica sufrió una explosión en 2007, a consecuencia de la cual fallecieron dos trabajadoras y otros diez empleados resultaron heridos. La fábrica abrió de nuevo en 2010. Tras una inversión de 20 millones de euros, Briseis produce más de 150.000 unidades de producto al día.