Compran siete hectómetros de los arrozales sevillanos para la seca Almería

Con el Trasvase del Negratín suspendido -hasta 50 hectómetros- desde hace más de un año y con la desaladora de Villaricos averiada -20 hectómetros- los regantes de Aguas del Almanzora han conseguido un caudal alternativo. Se trata de la compra de derechos de agua de los arrozales sevillanos del Guadalquivir cuyos trámites ya se han iniciado. Por una parte, dispondrán de 1,5 hectómetros que le corresponden de sus propios tierras en las marismas que ascienden a una extensión de 1.500 hectáreas que adquirieron hace más de una década a la familia Hernández Barrera; por otra, gestionan la adquisición de otros 5,5 hectómetros del reparto del Guadalquivir. En total, serán 7 hectómetros los que llegarán al Almanzora en una año seco, a pesar de las lluvia copiosa caída hace unas semanas. Un agua que servirá de alivio para las 17 comunidades de regantes que integra la sociedad Aguas del Almanzora, que aglutina a unos 10.000 regantes en un área de influencia de 24.000 hectáreas.

En los últimos meses, los regantes del Almanzora han intentado obtener concesión de derechos del agua del Júcar pero sin conseguir resultado. También han conseguido últimamente derechos de agua por permuta con el caudal del Tajo del agua de la desaladora de Torrevieja, en Alicante. Desde que realizaron la inversión en compra de tierras en las marismas del Guadalquivir, los regantes almerienses han llegado a producir algunas campañas hasta 13 millones de kilos de arroz, vendidos, en algunas ocasiones, a la firma Ebro Puleva, a través de la firma Herba. El arroz producido por Aguas del Almanzora se prepara en una fábrica de San Juan de Aznalfarache y se envasa posteriormente con el logotipo de marcas como Brillante, Sos, La fallera o La Cigala.

Las tierra de Aguas del Almanzora en la cuenca del Guadalquivir sevillana, están en los municipios de Utrera, Coria del Río y Cabezas de San Juan. La adquisición de los arrozales sevillanos en 2006 supuso para los regantes almerienses una inversión de 40 millones de euros con el respaldo financiero de Cajamar y Unicaja.

El caudal que llega al Almanzora con cargo a los arrozales sevillanos, se detrae del embalse del Negratín, en el Guadiana Menor, en la provincia de Granada, conectado a través de 120 kilómetros con el Almanzora.