Lo que pasa en Cuba

La represión trata de acallar por todos los medios el menor atisbo de protesta

Fermín Bocos
00:34 • 17 nov. 2021 / actualizado a las 07:00 • 17 nov. 2021

Como españoles, lo que pasa en Cuba, la falta de libertad que sufre el pueblo cubano, es asunto que nos concierne y mucho. El Gobierno cubano interpreta que detrás de cualquier manifestación popular anida el germen del rechazo al régimen comunista y las reprime todas con violencia. Temen que las protestas acaben encadenando manifestaciones que puedan acabar llevándose por delante al régimen.



Quienes, a pesar de la represión, se atreven a desafiar las prohibiciones son jóvenes que no avizoran porvenir, hartos de consignas y discursos revolucionarios que les suenan huecos. Los cubanos dedican gran parte de su tiempo a hacer colas interminables para conseguir lo imprescindible para comer. La economía planificada ha venido siendo un fracaso reiterado que era compensado mientras existió la Unión Soviética, que subvencionaba al régimen cambiando petróleo por azúcar. Después, con Hugo Chávez en el poder, el país vampirizado fue Venezuela, pero la pandemia y la crisis económica y humanitaria que también padecen los venezolanos ha extremado las condiciones de penuria.



Miguel Díaz-Canel, el presidente puesto a dedo por un Raúl Castro retirado y enfermo, carece del carisma de Fidel. Su autoridad políticamente vicaria hace de él el tirano que no dudará en recurrir a la violencia contra todo lo que crea que pone en peligro el régimen. Ya lo hizo el pasado 11 julio reprimiendo con dureza y encarcelando un centenar de manifestantes que pedían libertad y respeto a los derechos humanos. Ahora, en la protesta convocada ayer para exigir su libertad ha vuelto la represión.



Es un círculo infernal porque la represión trata de acallar por todos los medios -que son muchos- el menor atisbo de protesta. La novedad es que ahora quienes protestan son jóvenes, convocados por Yunior García, un autor teatral también joven y valiente. En su sencillez, el mensaje que promueve resulta demoledor para el régimen comunista: “Creo -dice- que el papel del arte es despertar. Tenemos-añade- que sacudir las cosas para que personas con dignidad que forman parte de esta sociedad decidan cambiar las cosas”. No nos olvidemos de los cubanos que sufren una dictadura mientras en nuestro Gobierno hay quien mira para otra parte.







Temas relacionados

para ti

en destaque