Almería, tierra de cortijos. Un libro recupera tradiciones rurales de la provincia

La obra recuerda episodios como el arreglo de matrimonios o el entierro de recién nacidos en habitaciones

José Miguel Carmona sostiene un ejemplar de su libro ‘Almería, tierra de cortijos’.
José Miguel Carmona sostiene un ejemplar de su libro ‘Almería, tierra de cortijos’.
Guillermo Mirón
19:29 • 25 dic. 2014

La provincia de Almería fue hasta la década de los 60 una tierra de cortijos, de población mayoritariamente campesina. Este modo de vida que se ha prolongado durante siglos hasta el reciente éxodo rural y un avance tecnológico sin precedentes, que ha dejado tras de sí todo un medio de vida, costumbres y tradiciones propias y arraigadas.




José Miguel Carmona Martos (La Aljambra, Albox) ha recopilado en ‘Almería, tierra de cortijos’ cómo vivían y trabajaban las familias almerienses del campo. Cómo transcurría su día a día en unos tiempos en los que no disponían de comodidades ahora básicas como un cuarto de baño. La publicación fue presentada en la capital el pasado lunes 15 de diciembre, aunque hoy viernes 26 de diciembre, a las 19.30 horas, serán las instalaciones del Ayuntamiento de Albox las que acojan un nuevo acto para darla a conocer. 




Cinco años de trabajo
Una obra que ha necesitado más de cinco años de trabajo y que narra todas las vivencias de “la gente del campo desde que nacían hasta que morían, con todas las dificultades que entonces pasaban”, cuenta el autor a LA VOZ.




Pero no solo se plasma el aspecto más crudo de la vida en los cortijos. “Hay una parte del libro llamada ‘Los acontecimientos festivos’ de cuando no estaban en la faena del trabajo diario. Cuando acudían a los bailes, las verbenas... Hay un capítulo de cómo se rondaba antiguamente a las mozas y de cómo se establecían antiguamente los matrimonios en el campo”, explica José Miguel Carmona.




Eso sí, la rutina diaria no estaba marcada precisamente por los festejos y el tiempo dedicado al ocio. Incluso los aspectos más lúgubres -para muchos desconocidos hasta ahora- tienen su espacio en este libro y han llamado la atención de estudiosos de la materia. Sobra decir que la tasa de mortalidad infantil era décadas atrás mucho mayor que al actual. Carmona relata que “al no dar tiempo a bautizar al niño y por lo tanto al no poder enterrarlo en el cementerio, si moría a los pocos días de nacer lo que se hacía era coger una caja pequeña de madera o incluso de cartón y enterrarlo incluso en el suelo de la habitación del cortijo”.




La publicación tiene fotos inéditas que acompañarán la lectura de quienes decidan indagar en un modo de vida que todos conocen, pero pocos al detalle. 




El libro ‘Almería, tierra de cortijos’ dará la oportunidad de estudiar la vida en los cortijos de la provincia con independencia del lugar al tener “casi todo en común”. Además ha sido escrito por alguien nacido y crecido hasta finalizar su juventud en uno de ellos, como otros tantos almerienses.




El autor
José Miguel Carmona Martos es oriundo de La Aljambra, aldea de Albox. Algo que ha influido en su interés por conocer costumbres rurales. Después de una infancia y juventud como pastor, se licenció en Física por la Universidad de Granada. Actualmente es coordinador del área científica del Instituto Nicolás Salmerón de la capital. 



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