Dos almerienses irán a Eurovisión por San Marino: la gran aventura de Megara

Eurovisión 2024 contará con dos grupos españoles, aunque uno de ellos cantará bajo otra bandera. Si Nebulossa representará a nuestro país con ‘Zorra’, Megara defenderá a la república más antigua de Europa con la canción ‘11:11’. Un tema en castellano con el que esta banda que tiñe de fucsia el metal ganó la pasada semana Una Voce per San Marino, el trampolín del pequeño estado al festival, cuya 68ª edición se celebra del 7 al 11 de mayo en la ciudad sueca de Malmö.

La presencia de Megara significará además el regreso de Almería a Eurovisión, 22 años después de que David Bisbal hiciera los coros a Rosa López con ‘Europe’s living a celebration’ (y al margen de los guiños del estonio Stefan y del neerlandés Waylon): tanto Kenzy Loevett, la cantante y compositora, como Aria Bedmar, bailarina y coreógrafa del grupo, tienen lazos con la tierra del indalo.

“Mi corazón ahora pertenece un 33% a Madrid, un 33% a Almería y el otro 33% a San Marino”, cuenta Kenzy Loevett al otro lado del teléfono al poco de regresar a España. Sus padres, “unos enamorados del mar”, decidieron instalarse en Aguadulce cuando ella tenía diez años. “Dejaron todo lo que tenían en Madrid y se fueron a vivir a Almería. Buscaban el agua como locos y allí siguen, no se irían por nada del mundo”, dice.

Kenzy es el corazón del Megara junto a Rober, el guitarrista. “Somos los fundadores y llevamos todo, desde la composición a las ideas”. Completan la banda Vitti, al bajo, y Ra, a la batería. Y junto a ellos dos bailarinas, claves en la rompedora puesta en escena del grupo: Emma y Aria Bedmar, uno de los rostros del nuevo cine español. 

“Ojalá llegásemos a Eurovisión”, confesaba, premonitoria, en agosto a LA VOZ esta actriz almeriense, deslumbrante en ‘Hermana Muerte’, su primer protagonista en una película, y que en breve estrenará en La 1 la serie ‘Operación Barrio Inglés’.

Benidorm-San Marino

No es la primera vez que Megara busca ir a Eurovisión: en 2023 quedaron cuartos en el Benidorm Fest, el concurso para elegir al representante español, con ‘Arcadia’. Entonces ganó Blanca Paloma. Y este año volvieron a intentarlo con ‘11:11’, aunque aquí no llegaron a la final.

“Antes de que la canción pasara sin pena ni gloria decidimos darle otra oportunidad. Eurovisión es nuestro sueño, un reconocimiento por el que llevamos tiempo luchando”, señala Kenzy. De ahí que buscaran un país que permitiera elegir a representantes de otras nacionalidades: es el caso de San Marino, que con solo 33.000 habitantes ha de buscar otras voces.

El camino para ganar Una Voce per San Marino no ha sido en absoluto fácil. Tras ser elegidos en un casting telemático, Megara fue uno de los 129 semifinalistas, distribuidos en cinco grupos. En la final tuvieron que superar a otros 16 rivales; entre ellos, la mítica cantante italiana Loredana Berté, que fue segunda.

A diferencia del Benidorm Fest, en San Marino solo tiene voz el jurado. “Teníamos todo en contra: el idioma y que el jurado, por edad, no es nuestro público objetivo. No esperábamos ganar, pero, para nuestra sorpresa, la vida nos ha hecho este regalo”, expresa la cantante.

Así es Megara

El concepto de banda de Megara no se ciñe “a lo tradicional”. “Por eso quiero aprovechar esta entrevista para dar valor a todo el que se sube al escenario con nosotros, a los que están detrás y a los que están debajo. Mucha gente forma Megara”, apunta.

Por ejemplo, la estilista María Moral, responsable del vestuario, aspecto que se ha llevado el presupuesto de Megara para Una Voce per San Marino. “Fuimos, como se dice ahora, con un euro y una ilusión”.  El resultado recoge la esencia del grupo: negro y rosa fundiéndose entre cuero, plumas y vestidos de esqueleto. “Tengo la suerte de que María Moral sea mi tía. En esta banda todo se queda en familia, por eso es tan especial”, concluye Loevett.