Azata quiere que El Algarrobico sea un ejemplo medioambiental

El responsable de la promotora Azata, empresa constructora del Hotel El Algarrobico, en Carboneras, José Domingo Rodríguez, ha mostrado su satisfacción tras el último dictamen del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que declara legal la licencia municipal de obras concedida por el ayuntamiento en el año 2003.

Pero Rodríguez ha dado un paso más y, en declaraciones a la Cadena SER, ha lanzado una oferta a  la Junta de Andalucía para llegar a un acuerdo sin precedentes. “La mejor opción es sentarse a dialogar y a llegar a un gran acuerdo sobre el inmueble”.

Además, el responsable de la promotora “ve posible que en ese espacio se combinen todos los intereses”, y ha añadido que que “hay muchas opciones para que el famoso hotel de Carboneras deje de ser el símbolo de la destrucción del litoral y pase a ser un referente del cuidado medioambiental”.
Así, el subdirector general de Azata ha hecho un “lamamiento a la Junta de Andalucía de cara a alcanzar un “consenso en torno al futuro del hotel que pase, según ha remarcado, por compatibilizar los medios de vida con la protección de entorno”.

Rodríguez ha recordado que “teóricamente, podríamos terminar la obra, que está a casi el 98% de ejecución, y pedir la licencia de primera ocupación. Ojalá que así sea, pero a nosotros nos gustaría que fuese con el máximo consenso posible”, ha reiterado.

El responsable de la empresa ha reconocido que el hotel se ha convertido “en un símbolo no buscado de la destrucción pero podría ser un símbolo de lo contrario si colaborásemos todos en ello”, para lo que ha asegurado que ha dejado “la puerta abierta a introducir alguna modificación en el proyecto para que el hotel de El Algarrobico pueda ser un referente de la protección medioambiental desde las muchas posibilidades que hay”.

Defensor del Pueblo
En esta línea se ha pronuncido el Defensor del Pueblo Andaluz, que ha señalado en un comunicado que los poderes públicos  “deben garantizar en cualquiera de los supuestos un destino para el espacio en el que se ubica la edificación coherente con los valores protegibles del Parque Natural del Cabo de Gata y Níjar que deben ser tutelados”. Por su parte, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, ha garantizado  la ayuda de la Administración central a la Junta de Andalucía ante el asunto del polémico hotel de  Carboneras, aunque ha lamentado que el Ejecutivo andaluz no siempre haya “dicho lo mismo” sobre esta cuestión, informa Europa Press.

Ayuda del Gobierno
La delegada ha dejado claro que el Gobierno central siempre ha tenido la misma posición ante este asunto, mientras que la Junta de Andalucía llegó a cambiar en 2004 la planimetría del plan de ordenación de los recursos naturales de Cabo de Gata-Níjar para que se pudiera levantar el hotel.

Sin embargo, según ha recalcado Crespo, el Gobierno  siempre “ha dicho lo mismo: respeto a las decisiones judiciales; esperar a que haya una decisión definitiva, y ayuda a la Junta, en el caso de que la decisión judicial sea la demolición, para poder llevarla a cabo”. Siempre “hemos tenido la misma postura, ayudar a la Junta en una cuestión que ha sido una dificultad tras otra y que tiene un proceso judicial muy largo y complejo”, ha señalado Crespo.

“Las cosas se hicieron muy mal”
El consejero de Turismo, Rafael Rodríguez, ha indicado que este proceso está poniendo de manifiesto que “en su momento se hicieron las cosas muy mal y no se tuvo la necesaria diligencia para que los procedimientos administrativos fueran pulcros”. Rodríguez ha lamentado que ahora “estamos padeciendo las consecuencias de lo que en su momento se hizo muy mal por parte de quien fuera responsable entonces de la Junta de Andalucía y por parte de quien fuera responsable del Ayuntamiento”.