Un botellón de récord para celebrar la Navidad con buen vino

El restaurante Manuela encarga un ‘Salomón’ de 18 litros

Antonio Ortiz y Adolfo Pageo con la macrobotella de vino
Antonio Ortiz y Adolfo Pageo con la macrobotella de vino La Voz
Antonio Fernández
07:00 • 19 dic. 2019 / actualizado a las 10:28 • 19 dic. 2019

Un establecimiento almeriense, el restaurante Manuela, situado en la parte norte de la Avenida del Mediterráneo, en la Calle Felipe II, ha decidido celebrar la llegada de la Navidad de una manera original y para ello ha elegido una botella de vino de 18 litros, algo insólito por estos pagos.



Este tipo de envases no está normalmente en el mercado y sólo se pueden adquirir por encargo con alguna bodega. Antonio Ortiz, gerente del Manuela, afirma que ha sido preciso realizar el encargo para disponer de un botellón de estas características en Almería.



La empresa elegida ha sido la Bodega Arrocal, con denominación de origen de Ribera del Duero, y el vino que se incluye en este gran formato es el ‘GallinitaCiega’, un caldo que ha ganado prestigio con mucha rapidez en los mercados nacionales.



El descorche
Antonio Ortiz explica que la intención del establecimiento es compartir esta novedad con los clientes de la casa y para ello se ha anunciado que la botella ‘Salomón’ (que así se denomina el envase de 18 litros servido por la Bodega Arrocal, a través del distribuidor almeriense Antonio Rueda), se descorchará el próximo viernes 27 de diciembre y, a partir de ese momento, se consumirá por copas sueltas.



Adolfo Pageo, el jefe de sala del restaurante almeriense, afirma que de un botellón del tipo Salomón, un envase que no forma parte de los catálogos de las bodegas salen aproximadamente 162 copas, que serán servidas directamente por Pageo que espera que se consuman pronto para que se vaya reduciendo el peso del botellón, de algo más de veinte kilos de peso.



Días para compartir
Por su parte Antonio Ortiz explica que le decisión de hacerse con un ejemplar de estas características responde al deseo de “compartir con nuestros clientes habituales, y los no tan habituales, ese ritual que consiste en compartir una buena mesa y una buena copa para brindar por este y por el siguiente año”.



El formato elegido lo considera un “capricho” destinado a quienes gustan de apreciar un buen vino en buena compañía, y también para los más curiosos”. Una curiosidad que ya es patente en el Manuela, donde muchos visitantes se hacen fotos con la botella.




Temas relacionados

para ti

en destaque