Salud confirma el negativo por estreptococo A en la niña fallecida en Adra

La Consejería de Salud ha informado este miércoles que se ha confirmado el negativo en estreptococo A en las pruebas realizadas a la niña de 15 meses que murió el pasado domingo en el centro de salud de Adra. 

Por otro lado, la consejera, Catalina García, ha afirmado que la menor de dos años fallecida hace dos semanas en Níjar, a la que sí se había detectado en su organismo la presencia del estreptococo del grupo A, “tenía todo el calendario vacunal al día”, por lo que ha pedido tranquilidad a los padres porque “el sistema funciona”. 

En cualquier caso, García ha precisado que Salud está aún a la espera del informe definitivo de la autopsia para poder evaluar las causas de la muerte de esta niña en Níjar, al igual que ocurre en el caso de Adra. 

Fuentes médicas consultadas por este diario han apuntado, por su parte, que la presencia del estreptococo A en su cuerpo no quiere decir por sí mismo que éste fuera necesariamente el causante de la muerte, ni mucho menos, teniendo en cuenta además que los casos muy graves causados por esta bacteria son muy pocos, y muchos menos los que provocan la muerte de quienes los sufren.

La consejera ha dicho que “todos los años se producen infecciones, y que todos los años, desgraciadamente, fallecen niños pequeños”, al tiempo que ha trasladado el pésame a la familia de la menor porque “es un dolor insoportable”.

No obstante, ha pedido tranquilidad a los padres y que acudan al sistema sanitario “cuando tienen sintomatología respiratoria que ya no pueden controlar asistiendo a sus pediatras”, porque “ahí están los hospitales para atenderlos y dar tranquilidad a la población, ya que el sistema funciona”.

La titular de Salud ha explicado que el estreptococo “es un infección respiratoria más”, toda vez que ha añadido que “ahora tenemos muchísimos” y algunas se manifiestan de manera “más grave”. Por ello, “siempre recomendamos a los padres vacunar a los niños”, ha destacado, y ha recordado que en el calendario está la vacuna contra la gripe para niños de seis a 59 meses, cuya tasa “es bajita” situándose en un 36%.

Guardería de San Isidro

Para el estreptococo A, en cambio, no existen vacunas y de hecho ni siquiera se han tenido que aplicar protocolos sanitarios en la guardería de San Isidro a la que acudía la niña fallecida, que era miembro de una familia marroquí.

Al igual que ha hecho la consejera, muchos pediatras están llamando también a la tranquilidad. Entre estos se encuentra el almeriense Francisco Giménez, quien señala que estos casos son consecuencia, a su vez, del incremento de las enfermedades respiratorias virales, como la gripe o la bronquiolitis. Y sobre todo, afirma que las infecciones por estreptococo son fáciles de tratar y por tanto no deben llevar a la alarma.

“Estamos ante una tormenta de enfermedades respiratorias entre las que se encuentran las causadas por el estreptococo A, que es cierto que pueden dar lugar a complicaciones graves, porque llegan cuando el sistema inmune está más debilitado en los pequeños. Pero hay que llamar a la tranquilidad, pues el tratamiento médico contra esta bacteria es fácil, mediante antibióticos y no hay un motivo real de alarma”, afirma. 

Giménez resalta que el estreptococo A que se está detectando “no es una cepa nueva, sino el de toda la vida”, por lo que la manera de actuar contra él no debe cambiar y habitualmente, salvo muy extrañas complicaciones graves, su tratamiento tiene éxito” (en un porcentaje cercano al 99%).

Multiplicación

El doctor explica que el gran número de infecciones causadas por el virus sincitial, la gripe, la bronquiolitis han provocado la multiplicación de las bacterianas, y esta acumulación es la que eleva las posibilidades de que alguno de ellos resulte grave. 

Pero esto no quiere decir, insiste el doctor, en que estas infecciones bacterianas deben hacer cambiar los tratamientos ni los modos de actuar de los profesionales sanitarios. 

Dentro de la tranquilidad que aconseja, Giménez  dice que siempre se debe estar “alerta ante cualquier complicación o caso grave”. Como consejo para los padres advierte de que los síntomas de esta gravedad son fiebre alta y un deterioro grave generalizado y decaimiento en el niño, junto a manchas en el cuerpo.