El extremismo violento anida en un 30% de adolescentes pero se puede prevenir

Profesores de la UAL presentan una guía para docentes y sociedad fruto de una investigación

Los autores del libro, la decana de Educación, la jefa de Orientación y los directores del Celia Viñas, IES La Puebla e IES Francisco Montoya
Los autores del libro, la decana de Educación, la jefa de Orientación y los directores del Celia Viñas, IES La Puebla e IES Francisco Montoya La Voz
Antonia Sánchez Villanueva
21:39 • 09 nov. 2022

Durante el mes de mayo de 2022, cuando todavía los alumnos de los centros educativos se reacostumbraban a la normalidad tras la pandemia, un millar largo de adolescentes de la ESO y Bachillerato de Almería, El Ejido, Vícar y Madrid fueron invitados a activar un código QR en sus teléfonos móviles para responder a un cuestionario. En él se les pedía contestar a 34 preguntas relacionadas con su contexto social y familiar, pero también con sus percepciones, actitudes y comportamientos sobre sus propias creencias, las relaciones con sus iguales y la justificación de la violencia. Aquel cuestionario, que rellenaron con la implicación activa de sus profesores y centros educativos, perseguía diagnosticar la situación de los adolescentes almerienses en relación con el extremismo violento y la radicalización. Respondieron 1.169 de ellos. De sus afirmaciones se deriva, entre otros muchos, un dato para la reflexión y la acción: en torno a un 30% mantienen actitudes extremistas y actitudes pro-violencia. 



Detrás de este trabajo previo de análisis y de la gestión, actual y futura, de sus conclusiones se encuentra el grupo interdisciplinar Investigación Internacional Comparada (ICC) de la Universidad de Almería, y se encuadra dentro del proyecto de I+D "Diagnóstico e intervención en adolescentes en riesgo de radicalización violenta en la zona del poniente almeriense: hacia una cultura de paz", que este grupo de investigadores compuesto por expertos universitarios en Sociología, Educación y Psicología lleva adelante. 



Uno de los primeros resultados de su labor acaba de ver la luz en forma de guía para el profesorado y la ciudadanía con pautas para desarrollar pedagogías de prevención y para actuar ante cualquier signo de alarma. El libro Transformando el extremismo violento, del que son autores Pilar Rodríguez, profesora de Sociología y directora del grupo de investigación, Antonio Segura, profesor de Trabajo Social, María Carmen López y Ana María Martínez, profesoras de Teoría de la Educación, se ha presentado este miércoles en un acto en la Universidad.



Pero, ¿qué consideramos extremismo violento? Esta denominacion se aplica a las creencias y acciones de las personas que apoyan o utilizan la violencia ideológicamente motivada para imponer sus objetivos ideológicos, religiosos o políticos radicales». Reúne dos aspectos: la aprobación del extremismo y la aceptación de medios violentos. La radicalización, en este sentido, puede entenderse genéricamente como el proceso de aceptación –y/o práctica– de la ideología y la acción extremista.



Atajar antes de que llegue el peligro 



Aunque, según ha explicado Pilar Rodríguez, el extremismo violento no puede considerarse a día de hoy como especialmente problemático en Almería, "entendemos que hay un colchón de violencia entre los niños jóvenes que ya es importante y que puede desarrollarse hacia posiciones más extremistas violentas; lo que pretendemos es actuar y ofrecer herramientas al profesorado, y también a la ciudadanía, para que puedan intervenir antes de que lleguemos a una situación que sea realmente peligrosa". 



Otro de los coautores, Antonio Segura, ha subrayado que durante el confinamiento se registró un aumento del grado de extremismo y quedó patente cómo el discurso de odio en las redes sociales "es un paso más hacia la acción violenta". Esta cuestión, la de la incidencia de las redes sociales en la propagación de las actitudes extremistas que dan paso a la violencia, figura también entre los datos relevantes del estudio: en algunos casos, los chicos encuestados usan hasta 8 redes distintas, y se ha establecido una relación significativa entre mayor uso de este tipo de medios de comunicación y mayor probabilidad de actitudes violentas. El trabajo, no obstante, no se queda solo en el análisis y en la edición de la guía. Como han explicado las otras dos coautoras, María del Carmen López y Ana María Martínez, el siguiente paso será el desarrollo de talleres en los centros educativos en busca del principal objetivo del proyecto de investigación: transformar el extremismo violento a través de pedagogías de prevención que cambien las actitudes. 



La presentación del libro guía ha contado con la presencia de la decana de la Facultad de Educación de la UAL, Isabel Mercader, quien ha mostrado su apoyo a la iniciativa del grupo de investigación y ha subrayado el valor que tiene para el trabajo de los docentes. También ha intervenido Matilde Romero, jefa de Servicio de Orientación de la delegación de Educación, para quien esta guía y la investigación que hay detrás se encuentran en "el camino hacia un cambio en la sociedad". 


Entre los protagonistas estaban también los directores de tres de los cuatro IES almerienses que han participado en el proyecto: Pedro Lozano (IES Francisco Montoya de Las Norias, El Ejido), Francisco J. Domínguez (IES La Puebla, de Vícar), y Antonio J. Carrillo (IES Celia Viñas). Todos ellos, colaboradores activos en la recogida de datos de la investigación y en el proyecto, han aplaudido el tener una herramienta con la que poder abordar situaciones que para los docentes se tornan complejas de gestionar. El cuarto centro de la provincia participante es el IES Villa de Vícar


El libro ofrece ejemplos para detectar manifestaciones globales y locales de extremismo violento en los centros educativos. Para transformarlo, se revisan algunos proyectos comunitarios transversales desarrollados en la Unión Europea, en España y en el ámbito local (Poniente almeriense), destacando la necesidad de trabajar la inteligencia emocional con los grupos de profesorado para manejar la situación en clase, deteniéndose en los objetivos, la preparación de la clase y la discusión. En la guía se aportan ejemplos de temas para abordar y se propone cómo realizar la evaluación de la discusión y el seguimiento en el aula. En la última parte, se relatan los valores implicados en la transformación del extremismo violento: la empatía, la solidaridad, el respeto a la diversidad, la convivencia y el compromiso. Al final los autores recogen algunos recursos electrónicos que permiten ampliar y profundizar en esta propuesta.




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