Ekobin, una apuesta almeriense por el reciclado inteligente

Wondereko comenzó a gestarse en 2017, cuando Ignacio López Garro regresó a Almería. Había estudiado la ingeniería de Telecomunicaciones en Granada, y la de Electrónica en Múnich. Luego trabajó allí en una startup y una multinacional, como Hardware Project Manager.

Y un día decidió volver con el sueño de emprender en su tierra, y desarrollar su propia empresa de Internet de las Cosas (IoT). Hoy, ya ha fundado dos proyectos. Por un lado, Domostics, “una empresa dedicada a la domótica y al IoT”, explica. “IoT a nivel residencial, en invernaderos, en oficinas, etc.”. Y, por otro, Wondereko, “la startup que estamos desarrollando ahora. La fundé con mi hermano, Pablo, arquitecto técnico y diseñador de productos industriales”.

Ignacio vio que se podía trabajar en el tema medioambiental. “Las tasas de reciclado en España no son muy altas, afirma, “la gente tira todo al mismo contenedor...”. Y recordó un sistema de reciclaje que hay en Alemania. “Además de la recogida selectiva, como tenemos aquí, tienen unas máquinas que te dan un incentivo si introduces la botella, o la lata. Eso no existe como tal aquí”.

Prototipo

El reto, entonces, fue hacer un sistema parecido aquí, en España. Tras darle muchas vueltas, surgió el Ekobin. Ya han solicitado la patente. “Es un contenedor inteligente, mas económico y mas reducido que los de la competencia”, explica Ignacio. “Imagínate como una lavadora. Es muy accesible, se puede acoplar en distintos espacios”.

Están terminando el desarrollo del prototipo, pero, básicamente, el funcionamiento es simple: usted echa el plástico o lata, y el Ekobin le da un incentivo. Que puede ser dinero, pero también otro tipo de servicios. “Es un producto pensado tanto a nivel doméstico, como para sitios frecuentados por el público:  gimnasios, aeropuertos, estaciones, la administración, oficinas, comunidades de vecinos, colegios, bares restaurantes…”. 

“Ellos tienen un problema muy grave con los residuos: dónde ubicarlos, o almacenarlos. Y nosotros nos ocupamos de eso.  En un futuro, el Ekobin incluso triturará los residuos. Y, cuando se llena, sus sensores nos avisan, y nos hacemos cargo de la recogida. No es solo el contenedor, también el modelo de gestión, todo a través de la nube, informatizado y automatizado”.

La primera muestra será en la próxima Feria de las Ideas, en la UAL, y luego desarrollarán el piloto en la capital. “Toda la información está en la web, wondereko.com”, dice Ignacio, “y las redes sociales”.