Manuel Escudero: "En el PSOE existen tensiones, pero estamos aprendiendo a conllevarlas"

Secretario de Área de Política Económica y Empleo de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE

Manuel Escudero, el pasado viernes, en el transcurso de la entrevista concedida a este periódico.
Manuel Escudero, el pasado viernes, en el transcurso de la entrevista concedida a este periódico.
Rosa Ortiz
20:28 • 04 feb. 2018

Esta entrevista se realizó el pasado viernes, poco antes de que Manuel Escudero (San Sebastián, 1946), responsable de la política económica del PSOE a nivel federal, charlara con afiliados almerienses. 




¿No tiene la impresión de que su partido está desaparecido del mapa? 
No, ¿por qué lo dice?   




Porque parecen fuera de la agenda.
No lo creo. En seis meses, hemos puesto sobre la mesa el Pacto de Rentas, el tema de los salarios, las pensiones, la precariedad en el empleo, la brecha salarial...  




¿Cómo vive el PSOE la cuestión catalana?  
Como una quiebra territorial importante, pero es que en España hay una quiebra social tan importante o más que ésta. Sin descuidar una cosa, estamos poniendo otras encima de la mesa. 




A algunos, dentro de su partido, no les gustó  el giro a la izquierda de su programa económico.
Ya...bueno, yo creo que el tiempo lo cura todo.




Permítame. Eso no se lo cree nadie.
Sí, sí, sí.  




¿Ahora son todos amigos otra vez?  
No es que seamos amigos, somos compañeros. No te voy a decir que no existan tensiones, pero estamos aprendiendo a conllevarlas. En este momento, y esto sí se puede decir categóricamente, el PSOE no tiene un problema de desorden interno acuciante que le impida hacer política. Al contrario. 




Ustedes, a lo suyo.
Claro, nosotros a lo nuestro. No competimos con nadie, ni a izquierda ni a derecha, más que con nosotros mismos. Porque lo que estamos decididos a hacer es a producir, semana a semana, mes a mes, soluciones concretas a problemas concretos.   


¿Se acabó el momento de los grandes discursos?
Sí, lo que queremos es ir a la gente y darle soluciones. Es la hoja de ruta que nos hemos trazado en esta Ejecutiva. 


¿Pedro Sánchez será presidente del Gobierno? 
Sí. 


¿Cuándo? 
Toda mi intuición y mi cálculo electoral me lleva a decir que dentro de dos años. 


¿Estará usted en su gabinete? 
Estaré a su disposición, como he estado desde hace un año. Al igual que Fernando Martínez.  


¿Qué le va a contar luego a los afiliados socialistas? 
No les voy a contar nada....


¿Ah, no?
No, vengo aquí a tener una conversación con ellos. Siempre se ha tenido la idea del político que va a un acto a pontificar, pero eso ya pasó: en esta sociedad, todos tenemos criterio. Hay que practicar la política más de igual a igual.


Una actitud de cercanía que se echa en falta.
Mucho y que, en la mayor parte de los partidos, ni la huelen. 


¿Cómo ve la situación económica en España? 
Existe un divorcio entre la recuperación económica y la mejora del bienestar social. Es un fenómeno nuevo al que nos podemos acostumbrar si confiamos en el PP, que es quien lo ha hecho posible. 
No podemos seguir con una tendencia de salarios a la baja, ni podemos seguir adelante con una precarización tan enorme del trabajo y con unas tasas de temporalidad tan escandalosas.  


¿Qué solución plantea?
Mejorar la calidad de nuestro capital humano, que haya más partenariado público privado en pos de inversiones para la innovación y que exista una verdadera política industrial que ahora no tenemos. Cuando yo veo en Almería estas extensiones de invernaderos pero no veo al lado fábricas de transformación, pienso que algo estamos haciendo mal. 


¿Se están perdiendo oportunidades? 
Claro. Por ejemplo, nos podemos convertir en una potencial mundial agroalimentaria. No es solo una frase. Esto significa trabajar duramente para lograr unos objetivos. 


¿Cuáles? 
Ahora, ningunos, no existen. España está viviendo al tran-tran, injusto y poco racional desde el punto de vista económico. 


 ¿Que nos lleva hacia dónde?
 Hacia la cifra mágica del 38%. 38 por ciento de ingresos públicos, 38 por ciento de gasto público.


Y eso, ¿qué significa? 
Lo que estamos viendo en los Presupuestos. Una reducción constante del gasto público social en Sanidad, Educación y Dependencia.  


Ha hablado usted de las pensiones. Yo nací en los 70 y a mí me parece que la pensión no voy ni a olerla. 
Pues tenemos una buena noticia para ti.  


¿Cuál?
Que nuestro sistema de pensiones es una joya, que lo vamos a defender y que es perfectamente posible que se mantenga si, por ejemplo, racionalizamos gastos en la Seguridad Social y se mejora la calidad del empleo. 


¿Y ya está?  
Y una medida extraordinaria que serían impuestos con los que complementar las cotizaciones para que no haya déficit todos los años. 


¿De qué tipo? 
No impuestos que graven más a las clases medias. Por eso hemos pensado en el impuesto a la Banca y en el de transacciones financieras. Pero nos estamos encontrando con que nadie quiere discutir con nosotros esta solución.


Rajoy dijo hace poco que no quería entrar en “eso” de que las mujeres cobremos igual que los hombres. 
Es que le traicionó el subconsciente. Somos el segundo país del mundo con la menor tasa de natalidad después de Japón. Parece que hubiéramos decidido autoliquidarnos lentamente. Aquí, la mujer tiene que elegir entre ser ciudadana de primera o ser madre. Todo lo que queda por hacer en igualdad real es gigantesco como para que venga Rajoy y nos diga que no nos metamos en eso ahora. 


 



Temas relacionados

para ti

en destaque