Según Mundo Deportivo, basándose en el atestado redactado por la Guardia Civil, en el lugar del accidente que provocó el fallecimiento José Antonio Reyes, el vehículo que conducía el jugador del Extremadura circulaba a 237 kilómetros/hora.
Posiblemente la alta velocidad del Mercedes Brabus, que conducía Reyes por la autovía A-376 en sentido Utrera (su localidad natal), fue la causa de que Reyes perdiera el control a causa del reventón de una de las ruedas y colisionara, para luego volcar e incendiarse.
El jugador regresaba a Utrera (Sevilla), tras entrenarse con el primer equipo del Extremadura.
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