Miguel Campello sonará en la Feria de Almería

Miguel Campello, quien fuera compositor y vocalista del conocido grupo ‘elbicho’, vuelve a la capital en solitario para presentar su álbum ‘5’ en directo.

En él, el cantautor ha desplegado su cara más visceral y personal a través de quince pasajes que viajan por la infancia, los recuerdos, el camino hacia la madurez, y las luces y las sombras de ir creciendo. Todo ello teniendo como protagonistas el tiempo y su devenir.

Un disco que continúa marcado por su personalísimo sello de identidad a caballo entre el mestizaje, el flamenco, el rock y la fusión. Como novedad, esta vez también ha experimentado con géneros como el  jazz, hip hop, y melodías con reminiscencias árabes a ritmo de palmas y guitarras.

Kuver Producciones se encargará de este espectáculo que forma parte de la programación de verano del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Almería.

El evento, el día 13

El único concierto de Miguel Campello en la provincia tendrá lugar el próximo día 13 de agosto a las 22 horas en el recinto ferial. Las entradas podrán adquirirse en la taquilla del Teatro Cervantes y del Teatro Apolo, así como en las páginas web www.almeriaentradas.com y www.almeriaculturaentradas.es. El mismo día del concierto podrás conseguir entradas una hora antes de que dé comienzo.

El trabajo que viene a presentar se suma a una obra digna y versátil con entregas precedentes como  ‘Chatarrero’ (2011), ‘Pájaro que vuela libre’ (2013), ‘Camina’ (2015) y ‘Agua, pan, amor y vino’ (2016). Con este nuevo disco, una vez más, se abre en canal sin censuras, sin temores y asumiendo riesgos, como acostumbra.

‘5’ aterriza en un panorama insólito, en una realidad inédita a la que nunca habíamos asistido fruto de la pandemia global y pone en jaque a la humanidad cada vez más necesitada de nuevas raíces que aseguren su permanencia y la aten al momento que vivimos.

Aunque algunas de las canciones del álbum estaban escritas desde hace varios años, lo cierto es que este trabajo profético toma valor de vaticinio porque representa un presente y un futuro que, hasta no hace mucho, todavía eran pasado.