Rubi está de fiesta

Rubi está de celebración esta semana después del partido del pasado sábado ante el Fuenlabrada en el Estadio Fernando Torres, donde no se ganó, pero se sumó un punto que siempre debe ser valorado en esta categoría tan complicada, como es la Segunda División.

El entrenador catalán del equipo almeriense está de enhorabuena porque no todos los días se cumplen 25 partidos de Liga en un banquillo, y menos en un banquillo tan caliente como el del Almería desde que llegó el ministro Turki Al-Sheikh. Está haciendo historia y espera terminar esta temporada a lo grande con el ascenso del equipo a la Liga de las Estrellas, que es por lo que suspira toda la provincia.

Objetivo

Rubi ha encajado a las mil maravillas en la dinámica del club rojiblanco, está encantado en Almería, donde es feliz con una plantilla que ha ido haciéndole cada día más fuerte hasta consolidar a sus jugadores como los mejores del campeonato, a falta de dos jornadas para el final de la primera vuelta del curso en el fútbol de plata. Queda todavía mucho piedra por picar hasta llegar al final de la Liga, pero el Almería está  en el buen camino para llegar a buen puerto cuando se cumpla la jornada número 42 esta temporada.

Rubi tiene las ideas muy claras y ha sabido conectar con la plantilla desde el primer día de la pretemporada haciendo que todos los jugadores del equipo almeriense se sientan protagonistas en la plantilla 21-22. Lo de que no hay titulares y suplentes en el Almería cada día suena a menos topicazo en el proyecto de Turki Al-Sheikh.

Los números de Rubi en los 25 partidos de Liga en el banquillo son fantásticos, son números para acabar al final en la máxima categoría del fútbol nacional. Ha logrado 16 victorias en los 25 encuentros de Liga, que son una auténtica barbaridad, mientras que empató cinco partidos con solo cuatro derrotas, que son muy pocas en los 25 partidos de Liga como técnico del equipo almeriense.  

Pasado

El de ViIassar de Mar debutó como entrenador del Almería en la jornada 37 la pasada temporada empatando con el Oviedo en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, donde con Rubi no se conoce la derrota  en un recinto que se ha convertido en un auténtico fortín con Rubi en el banquillo del Almería.
Estuvo seis encuentros la pasada temporada en la fase regular antes del Play Off de ascenso a Primera División con tres victorias, dos empates y una derrota, que fue ante el Cartagena en el Estadio de Cartagonova.

Los números en casa con Rubi al mando de las operaciones están siendo espectaculares, ya que no se ha perdido ni un partido en el recinto deportivo de la Vega de Acá y, además, la afición del Almería siempre ha visto goles rojiblancos. Un dato espectacular de un gran Almería desde que llegó el técnico catalán. El míster y su cuerpo técnico están contentos con la marcha del equipo, pero saben que queda por delante una segunda vuelta que será muy dura con tantas cosas en juego, por arriba y por abajo.