La vuelta al cole aprendiendo a cultivar en el huerto escolar

El colegio Cerro del Castillo de Cantoria abre sus puertas tras las vacaciones de verano con grandes novedades para sus alumnos. Nueva pintura de fachadas y barandillas y nuevas instalaciones deportivas son algunas de las novedades de las que disfrutarán los niños cantorianos este nuevo curso 2022-2023.

Purificación Sánchez, alcaldesa de Cantoria, informó de los trabajos que se han llevado a cabo en este centro. “Hemos aprovechado el verano para poder hacer unas mejoras dentro del colegio y al mismo tiempo que se ha mejorado el edificio dotamos a los niños y niñas de nuevos servicios en el centro”.

La primera edil explicó que además de este mantenimiento habitual, lo que se ha hecho ha sido acondicionar una zona del colegio desaprovechada y se ha transformado en unas pistas deportivas y en la gran novedad para este curso: “un huerto escolar”.

La idea de configurar un huerto en el colegio del pueblo venía fraguándose hacía unos cuantos años atrás “y ya por fin podrán estrenar este nuevo huerto y estas nuevas pistas deportivas y esperamos que lo disfruten muchísimo”, confirmó la alcaldesa.

Una iniciativa que desde el Consistorio esperan que sea un gran éxito entre los más jóvenes del municipio, “las novedades le gustan a todo el mundo” confirmó Purificación Sánchez.

El lunes día 12 comenzaron las clases en este centro educativo cantoriano donde los alumnos se llevaron una gran sorpresa al encontrarse toda esa zona dedicada a ellos. Aunque, según explicó la edil, “todavía tendrán que pasar unos días para terminar de acondicionar las pistas deportivas, que están pendientes de ser pintadas en los próximos días y la zona del huerto aún se ve sin ningún cultivo, con la tierra y las vallas” comentó la regidora.

“Pero cuando ellos empiecen a cultivar y ver como esas plantas que ellos ponen van creciendo y dando sus frutos pues será algo muy interesante para cualquier niño”,  sobre todo para los niños de zonas rurales como son los de Cantoria que están muy familiarizados con el mundo rural y con la agricultura.

Además, Purificación Sánchez, alcaldesa, explicó que cuando salgan los frutos, los niños podrían hacer un “pequeño proyecto de emprendimiento para jóvenes” y esas frutas y verduras se podrían vender en el mercado del pueblo para que los más pequeños vean cómo funciona una empresa desde cero. “Los niños son esponjas aprendiendo ideas y se le puede sacar muchísimo partido a ese huerto” apostillaba la edil.