Los críticos con la dirección institucional de Cs censuran la elección de Burgos

El sector crítico de Ciudadanos en la provincia de Almería (que resultó ganador en la última elecciones de compromisarios para elegirla la sucesora de Albert Rivera) ha censurado lo que considera "imposiciones, dedazos e injerencias en las designaciones desde Madrid, de los miembros para la configuración del Comité Provincial y de su Junta Directiva de Cs en Almería".

Se trata de una alusión poco velada a la designación como coordinador provincial de Rafael Burgos "por ser un nombramiento no consensuado" y según este sector de Ciudadanos, impuesto "desde Sevilla a Madrid", aunque tienden la mano "al sector minoritario" como llaman a la dirección oficial del partido y cargos institucionales debido a la derrota en la pasada elección de compromisarios.

"Pese a que el partido en su nueva etapa con Inés Arrimadas señalaba querer contar con la afiliación representada por sus agrupaciones, coordinadores y portavoces, a día de hoy, según fuentes internas no se ha producido, lo que conducirá a una mayor fractura entre el partido y su afiliación como ya viene siendo habitual desde hace tiempo por todas las decisiones tomadas a espaldas de sus afiliados, donde la implantación del partido apenas ha llegado a 12 poblaciones en toda la provincia de los 103 municipios que la componen", denuncian en un comunicado en el que responsabilizan a la presidenta del Parlamento andaluz y excoordinadora provincial Marta Bosquet, por esas cifras.

Entre las agrupaciones con mayor número de afiliados y que apoya al sector crítico se encuentra la de Huércal-Overa, entre otros miembros de Cs en la provincia. "Desde la V Asamblea General de Ciudadanos celebrada en mayo de 2020 en Madrid, el sector mayoritario no han sido consultados en forma alguna, con objeto de buscar un mayor de consenso e integración a la hora de conformar los órganos autonómicos y provinciales en función de los apoyos demostrados por los afiliados", añaden desde el sector crítico.