“No soy responsable del problema, fue un error administrativo”

La sentencia del caso Spancrete sigue generando polémica en el municipio de Antas, donde el exalcalde socialista Bartolomé Soler ha salido al paso de las acusaciones vertidas por la también exalcaldesa Isabel Belmonte, que responsabilizó recientemente a Soler y a parte de su equipo de Gobierno de la deuda de unos 3 millones de euros que arrastra el Ayuntamiento tras el veredicto judicial.

En una entrevista realizada en el programa Hoy por Hoy de la Cadena SER el exalcalde defendió el cambio de calificación de los terrenos vendidos a la empresa Spancrete en el año 2000 -operación que fue anulada por el Tribunal Superior de Andalucía en el año 2009- afirmando que estos “siempre fueron patrimoniales” y que solo constaban como “comunales” debido a un “error de transcripción” que cometió el secretario del Ayuntamiento a la hora de listarlos en el inventario. 

Cambio “justificado”

La anulación del cambio de calificación ha sido la que ha derivado recientemente en una sentencia por la que se responsabiliza al Ayuntamiento del pago del total de la inversión que la empresa ha realizado en las parcelas, cantidad que sumando los gastos procesales y otros costes ronda los 3 millones de euros. 

Sin embargo, el alcalde justifica el cambio asegurando que cuenta con documentación en la que se atestigua que los terrenos en cuestión fueron bienes patrimoniales, propiedad del Ayuntamiento, “desde 1910”, como por ejemplo “el Boletín Oficial de la Provincia de los años 45 y 48”, o varios inventarios de bienes de los años 80 e incluso 90. “¿Por qué la justicia no ha tenido eso en cuenta?”, se pregunta Bartolomé Soler.

“No soy responsable”

Así las cosas, el que fuera alcalde de Antas ha confesado no sentirse culpable por esta deuda millonaria que ahora arrastra la corporación municipal, señalando en cambio a la exalcaldesa del Partido Popular, Isabel Belmonte, que fue la principal impulsora de la denucia que finalmente terminó con la anulación de la venta.

“De ninguna de las formas me considero responsable de este problema, fue simplemente un dato administrativo, que con un pleno que lo hubiera reconocido estaba saldado”, mantuvo, culpando a su vez a Belmonte de haber conducido al municipio a “una sangría económica”.

Al exalcalde no le cuadra que la alcaldesa contratara en su día “al mismo abogado que defendió que la venta era ilegal, para defender al Ayuntamiento tras la sentencia de 2009”, unos servicios que según Soler la alcaldesa presentó como gratuitos, pero que terminaron costando 192.000 euros. “Si eso es decir la verdad y hablar sinceramente al pueblo, yo la veradad es que no lo entiendo”, remata Bartolomé Soler.