El hombre que inspiró a Guille, el amigo de Mafalda

Jorge Timossi - periodista argentino.cubano

  • La Voz
El periodista argentino-cubano Jorge Timossi, cuya apariencia inspiró a su amigo el humorista Quino a la hora de crear a su personaje Felipe de la historieta ‘Mafalda’, murió en La Habana el pasado 11 de mayo, a los 75 años, víctima de un infarto de miocardio. El periodista nacido en la Argentina, y nacionalizado cubano, trabajó desde el año 1961 en la agencia estatal Prensa Latina, nacida tras el triunfo de la revolución liderada por Fidel Castro, y para la que realizó coberturas periodísticas en países como Francia, México, Argelia, Libia, Sudán o Marruecos. Como un hecho destacado en su biografía profesional, Timossi fue corresponsal en Santiago de Chile durante el golpe de Estado de 1973, y pudo comunicarse por teléfono con el presidente Salvador Allende poco antes de su muerte. Más tarde, recordaría estos momentos en su libro ‘Grandes Alamedas: el combate del Presidente Allende’. Además, reportó como enviado especial sobre la revolución iraní, así como sobre viajes internacionales de Fidel Castro, y fue director de la Agencia Literaria Latinoamericana y vicepresidente del Instituto Cubano del Libro. Amigo de toda la vida del humorista gráfico argentino Joaquín Salvador Lavado ‘Quino’, quien decía de Timossi que tenía “dos graciosos dientes de conejito”, terminó inspirando el nacimiento de Felipe, el conocido vecino y amigo de Mafalda y, a la larga, uno de los personajes fundamentales de esta tira cómica que se ha convertido en un clásico. El despistado y perezoso Guille apareció por primera vez en la popular tira cómica el 19 de enero de 1965, y desde entonces pasó la mayor parte de las entregas leyendo historias del ‘Llanero Solitario’, escuchando a los Beatles o jugando al ajedrez. En 1995, Timossi publicó el libro ‘Cuentesillos y otras alteraciones’, ilustrado por Quino. Químico de formación, fue también amigo del periodista Rodolfo Walsh, quien a comienzos de la década de los 60 le dijo que iba a crearse una nueva agencia de prensa y que debía acudir a una dirección en Río de Janeiro para subirse a un barco en el que también viajaron en un principio Gabriel García Márquez y el periodista argentino Jorge Massetti.