Diario de una ausencia

Familia Navarro-Berenguel

Manuel Navarro Berenguel

  • La Voz
Sigo preocupado por Mama y Nani. Tratan de hacerse las fuertes, pero siguen mirando hacia atrás y les cuesta otear el futuro. Pasan fases de euforia y otras de profunda tristeza. No sé cómo arreglarlo pero no pierdo la esperanza de hacerlo. Pepe y Noelia procuran poner al mal tiempo buena cara y están aguantando tormentas en un mar de dudas. Los dos son luchadores y gente muy trabajadora. Pepe tiene más trabajo del que puede y muchos frentes en los que luchar y Noelia ejerce de madre omnipresente sin tiempo para nada.Te querían, nos quieren y los queremos. Los niños, tus niños, crecen sanos y felices dentro de lo posible. Son normales papa, muy normales. Pepe se parece a ti, tiene tu cuerpo y algo de tus andares y tu tranquilidad. Luis es una culebra viva y rápida que se escurre detrás de los balones y que como tú disfruta con el fútbol. Martina es la señorita, reflexiva y con mundo interior pero coqueta y presumida que hubiera hecho contigo lo que quisiera y Lucas, ¡ay Lucas ¡es un soplo de vida que no llegaste a conocer pero que está en esa edad en la que hubieras disfrutado mordiéndolo y él hubiera muerto de risa. Yo, ya sabes. Como ves procuro borrar de mi diario todo lo accesorio, lo negativo, eso de lo que han estado llenos los días de los dos largos años transcurridos. No merece atención tanto malnacido ni tanta mala baba. Trato como en mi vida cotidiana de centrarme en la familia y en el futuro porque fuera de eso, todo es oscuridad, miserabilidad y abismo en los que corres el riesgo de caer atrapado si le prestas atención. Esta es la hoja de un diario virtual que pudiéramos hacerte llegar. En ella te resumimos nuestro día a día, el de LA FAMILIA, lo que te contaríamos si te tuvieramos cerca y pudieras escucharnos como hacías, si pudiéramos por un solo día y una última vez escuchar tu fuerte y profunda voz. Como no podemos hemos aprendido a conformarnos, a no escucharte, a no tocarte pero nunca vamos a aprender, ni queremos, a dejar de sentir que sigues protegiéndonos y viendo nuestra vida desde ese Arco Iris donde Martina te busca los días de lluvia. Te queremos, estas en nosotros y seguimos luchando. Tu Familia