El Supremo deja en el aire los riegos de 3.000 hectáreas en la vega

El Tribunal Supremo acaba  de desestimar el recurso de casación presentado por la Junta de Andalucía sobre la  concesión del agua para riego agrícola de la depuradora de El Bobar. El alto tribunal no ha admitido a trámite el recurso presentado por la letrada del Gobierno autonómico, considerando su falta de fundamentación jurídica y ratifica como nula la resolución de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio por la que el 31 de julio de 2018 otorgó a la Comunidad General de Usuarios de Almería (CGUAL), la concesión de las aguas depuradas de la Estación de El Bobar en el término municipal de Almería. La CGUAL está formada por la Comunidad de Regantes Cuatro Vegas y el Sindicato de Riegos de Almería y siete pueblos de su río. 

La providencia del alto tribunal es un jarro de agua fría para los agricultores de la Vega y de la zona del Andarax que, en puridad, deberán quedarse sin los 12 hectómetros de agua tratada que aporta la depuradora al confirmarse la nulidad firme de la concesión por haberse presentado en su momento por parte de Cgual fuera de plazo. La decisión judicial afecta a 3.000 hectáreas de frutas y hortalizas en Almería, Benahadux, Gádor, Huércal de Almería, Pechina, Rioja. Santa Fe de Mondújar y Viator, que son los municipios también que vierten sus aguas residuales en El Bobar para su posterior tratamiento terciario y su uso para riego agrícola mediante canalizaciones.

 La pregunta que se hacen ahora los regantes sobre- saltados es con qué caudal van a sustituir esos 12 hectómetros de rigor si se ejecuta la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía de 22 de julio de 2022 refrendada ahora por el Tribunal Supremo. A partir de ahora pueden pasar varias cosas: que la parte recurrente, un agricultor de la vega, no pida la ejecución de la sentencia, aunque los regantes continuarían en precario; que sí se pida y que los regantes de la CGUAL pidan, a su vez, una concesión temporal de uso del agua mientras se tramita de nuevo la definitiva ante la Dirección General de Planificación y Gestión del Dominio Público Hidráulico; que  se corte directamente el flujo de agua hasta que no se obtenga la concesión reglamentaria. 

Esta última posibilidad podría ser una ruina para el campo de la vega de Almería, quizá paliada, en parte, con una petición al ayuntamiento como riegos de socorro de la desaladora de Almería que gestiona Acciona-Abengoa, que está en fase de ser ampliada dentro del nuevo Plan Hidrológico de las Cuencas Mediterráneas. El presidente de Cgual, José Antonio Pérez, ha expresado su preocupación sobre el futuro de los riegos, “sobre todo porque aunque no se ejecute la sentencia, nos deja a la Comunidad de Regantes en una indefinición jurídica”. Los regantes, para cobrar fondos operativos o para pedir créditos deben de aportar certificado de abastecimiento de agua.

Esta campaña, los regantes de la vega están doblando las necesidades de agua  de diciembre a marzo con respecto a la campaña anterior. Pérez explica que “cuando los precios caen se riega menos, pero esta campaña, con el bueno tono en los mercados, los agricultores aprovechan para regar más sus hortalizas”.