Tras varios meses de trabajo, los armadores de Carboneras, agrupados en la cooperativa Carbopesca, han creado la marca de calidad ‘Pez Espada del Mediterráneo’, con el objetivo de que los consumidores conozcan la calidad y la frescura de esta especie del que los carboneros son líderes en capturas.
Pretenden, con ello, posicionarse como imagen de garantía al consumidor, distinguiendo su procedencia, método de captura y responsabilidad social y ambiental.
Los primeros barcos palangreros que realizarán la prueba piloto para dar a conocer esta marca en los mercados serán, entre otros, el Miguelacho, el Belmonte Quifes y el tío Michel, alguno de ellos ya faenando en la costa de Menorca.
En esta marca de calidad se integrarán las capturas de pez espada -también denominado aguja o emperador- a los que se les habrá asignado un una etiqueta con el código de barras que irá grapado en la piel de la aleta. Con una aplicación de móvil específica, que se pasará por el código, el comprador mayorista y el consumidor podrán tener más datos de captura de los que ofrece la obligatoria trazabilidad.
La temporada del pez espada se inicia ahora, aunque adquiere su punto álgido en mayo y junio. Al tener una mayor cuota de pesca de aguja que de atún, esta pesquería es más rentable para la flota carbonera que la del atún rojo. La cuota de esta última especie, que se ha visto incrementada ligeramente en el último reparto, ha sido vendida un año más por los armadores de Carboneras a empresas multinacionales como la catalana Balfegó o la murciana Ricardo Fuentes ante el escaso tonelaje -según los armadores- permitido por las la administración intergubernamental ICCAT (Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico), que es el organismo cancerbero de esta pesquería. Hace unos días que han vuelto una decena de barcos carboneros a puerto, desde Canarias y otras zonas del Atlántico, con licencia para pescar en caladero nacional. La mala suerte se ha cebado con estos barcos ya que en tres meses solo han podido faenar 15 días por el mal tiempo.
Carboneras cuenta con la mayor flota marrajera de todo el Mediterráneo -43 embarcaciones- que faenan con el arte de pesca más selectivo compuesto por palangres, jarcias y anzuelos. Utilizan la caballa y el estornino como cebo para calar en torno a unos 2.500 anzuelos con los que capturan el cotizado pez espada con el que se cocina, por ejemplo el teriyaki oriental.
La pesca ha sido ancestralmente el principal medio de vida de las familias carboneras, compatibilizado con el turismo y la industria.
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