Desde hace unos días, los bañistas de las playas urbanas de la capital contemplan una curiosa escena: tres operarios del Ayuntamiento de Almería recorren el Paseo Marítimo haciendo paradas en su trayecto para bajar a pie de playa espuerta en mano y, con ella, retirar a esos incómodos visitantes de cada verano: las medusas están acosando al personal en pleno agosto.
Y esta mañana no ha sido una excepción. De hecho, si bien la llegada de medusas no ha dado lugar a que se llegue a prohibir el baño, sí que ha dado pie al cambio de color en las banderas que advierten del estado del agua: a eso de mediodía, el verde se teñía de amarillo para avisar a los bañistas de que conviene bañarse con precaución.
El motivo de que sea amarilla y no roja es que, tal y como explican fuentes municipales, para que se establezca el nivel de peligro propio de la enseña roja debe haber una concentración muy alta de medusas o de picaduras, y no se ha dado ninguna de ellas en el día de hoy.
Servicio de limpieza
Además, tal y como explican desde el Consistorio, esos tres operarios recogiendo, literalmente, medusas, forman parte de una medida excepcional tomada desde el Ayuntamiento desde hace semanas y que afecta única y exclusivamente a las playas de El Zapillo, ya que son las únicas en las que se han dado este tipo de avisos.
Para apoyar esta labor de recogida de medusas (que no forma parte del servicio de limpieza habitual) también se ha intensificado el trabajo del barco que habitualmente recorre parte de la bahía de Almería limpiando la costa.
Medusas
La continua aparición de medusas este verano en las playas de El Zapillo que ha llevado al Ayuntamiento a ese plan excepcional de recogida se suma a la aparición, hace tan solo unos días, de una medusa de importantes proporciones en las playas de Aguadulce o lo que sucedía en el no tan lejano mes de abril y que presagiaba un verano lleno de medusas: una plaga de medusas de tonos morados ocupaba gran parte de la arena en la playa de San Miguel.
Efectivamente, las altas temperaturas ya hacían aventurar que este año habría una especial presencia de medusas en las playas de Almería, pero no es la única razón por la que este animal, del grupo de los celentéreos, se acerca cada año a las costas (en agosto de hace dos veranos más de 1.600 personas precisaron asistencia sanitaria en Almería a causa de las picaduras de las medusas). Junto con la elevación de la temperatura del mar que se registra en los últimos años, a causa del cambio climático, la escasez de depredadores y la muy escasa salida al mar de aguas dulces son las principales causas.
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