Denuncian el uso de vigilantes privados en puestos públicos en la Alcazaba

La Unión de Sindicatos de Trabajadores en Andalucía (USTEA) ha denunciado a la Delegación provincial de Cultura en Almería ante la Inspección de Trabajo por utilizar a vigilantes de seguridad de una empresa privada en puestos destinados a empleados públicos laborales en la Alcazaba, con la supuesta intención de ahorrar costes.

Según el sindicato en Almería, los vigilantes de seguridad de una empresa privada contratados por la Junta en el monumento realizan las mismas tareas y utilizan los mismos materiales y maquinaria que los empleados públicos a los que ‘sustituyen’ de manera presuntamente irregular, puesto que, como expone además en su denuncia, la actual Relación de Puestos de Trabajo del Conjunto Monumental de la Alcazaba incluye cuatro plazas de vigilante con la categoría de empleado público laboral.

Sin embargo, en la actualidad hay dos plazas vacantes -desde abril y octubre de este año- que, pese a que están dotadas -es decir que existe una asignación económica para ellas- no han sido cubiertas porque estas funciones serían realizadas por los trabajadores de la empresa privada. En el lado opuesto, las contrataciones con la empresa privada han aumentado, según el sindicato.

“Como los trabajadores de ambas empresas hacen las mismas tareas, la empresa de seguridad privada no cede “horas” sino trabajadores para suplir bajas, descansos y vacantes de empleados públicos (respectivamente desde abril y desde octubre). Es decir, la empresa cedente actúa, presuntamente, como una empresa de trabajo temporal, no siéndolo”, expone el sindicato en su denuncia.

“En segundo lugar, esto supone una estrategia empresarial basada en el ahorro de costes, porque al proceder de esta manera la empresa cesionaria no tiene que pagar salarios tan elevados ni correr con el gasto de contratación, responsabilidades y despidos. Por este motivo, dicha forma de contratar es tan beneficiosa para las entidades implicadas y tan perjudicial para el trabajador, que llega a trabajar por horas”, añade.

USTEA concluye en el escrito dirigido a la Inspección de Trabajo que “la situación generada exime a la Administración Pública, en este caso a la Delegación territorial de Cultura y Patrimonio Histórico de Almería, de dotar y cubrir los puestos de trabajo, con el consiguiente ahorro que le supone, prescindiendo del procedimiento normal de cobertura de puestos de trabajo, lo que supondría un subterfugio empresarial de difícil justificación legal”.

El sindicato pide finalmente a la Inspección que, tras la correspondiente visita, determine si tanto la empresa principal como la cliente pueden estar cometiendo una infracción laboral muy grave por una supuesta cesión ilegal de trabajadores, según el artículo 8.2 de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social y del artículo 43 (punto 2) del Estatuto de los Trabajadores.

USTEA considera que la Alcazaba necesita más del doble de vigilantes de los que actualmente tiene en plantilla, apenas cuatro puestos de trabajo para vigilar en sendos turnos dos hectáreas y media de monumento.