El salario mínimo enfrenta a los sindicatos con Coag y Asaja

Un 80% de los trabajadores que cobrarán más en Almería están vinculados a la agricultura

Recogida de tomates en un invernadero almeriense.
Recogida de tomates en un invernadero almeriense.
Simón Ruiz
07:00 • 27 ene. 2020 / actualizado a las 09:51 • 27 ene. 2020

El acuerdo para la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para elevarlo hasta los 950 euros mensuales ha enfrentado en la provincia de Almería a los principales sindicatos, UGT y Comisiones Obreras, con organizaciones agrarias como Coag y Asaja.



Ese incremento del salario - 50 euros más al mes que en el año 2019 - beneficiará en Almería a unos 50.000 trabajadores. Es la cifra que han aportado tanto responsables del PSOE como del sindicato UGT.



En el caso del sector agrícola, la organización sindical afina más y apunta a unos 40.000 trabajadores vinculados al campo almeriense.



Tanto Coag como Asaja creen que la patronal agraria, los propietarios de invernaderos, no podrán asumir un incremento de los costes laborales. Así lo han trasladado dirigentes como Eduardo López Vargas y Pascual Soler, respectivamente.



El caso de Marruecos



“Resulta inasumible la subida del salario mínimo para las pequeñas y medianas explotaciones con 2-3 trabajadores fijos. Nuestro coste laboral diario (69 euros) multiplica por 14 el salario de un jornalero en Marruecos (5 euros al día)”, sostiene López Vargas.



Añade el dirigente de Coag que “estamos a años luz de poder trasladar al precio de nuestros productos el incremento de costes, en un mercado desregulado en el que se impone la ley de la selva”.



Desde Asaja se argumenta que el incremento del SMI acordado entre empresarios, sindicatos y el Gobierno la pasada semana llevará al paro, sobre todo, a trabajadores del campo.


“Va a dinamitar la negociación de los convenios colectivos que se está llevando a cabo en todas las zonas productoras”, apostilla Pascual Soler.


“Hipócritas”

Argumentos totalmente opuestos a los de las organizaciones agrarias han trasladado en los últimos días sindicatos como UGT y Comisiones Obreras.


La réplica ha sido contundente por parte del secretario provincial del Sindicato de Industria de CCOO, Javier Castaño. A su juicio, las declaraciones de Coag en contra de la subida del salario mínimo son “hipócritas”.


El responsable agrario de Comisionres Obreras ha añadido que “Coag y Asaja no se han quejado de los tres años en los que no ha subido el coste de la mano de obra en Almería, mientras si que lo hacía en el resto de sus competidores españoles”. 


Al paro

Por su parte, la secretaria provincial de UGT, Carme Vidal, ha denunciado que ambas organizaciones agrarias están trasladando “ mensajes negativos de destrucción de empleo”.


“Son alarmas insostenibles ya que de otra forma no se hubiese llegado a acuerdo alguno con los agentes de la patronal, y además la anterior subida de 735 a 900 euros, también alarmada en este sentido, no produjo reducción de empleo como ahora también anuncian”, dice.


Para Carmen Vidal, “en el sector agrario, aún con el convenio estancado y sin voluntad por parte del empresario agrario a ninguna subida salarial, es necesario tomar medidas contundentes que garanticen la aplicación de esta nueva normativa”. 


La subida del Salario Mínimo Interprofesional ha sido bien recibida en Almería por dirigentes de PSOE, Izquierda Unida y Podemos y criticada por Vox, cuyos diputados se han alineado con las tesis de Coag y Asaja.


La polémica almeriense llega hasta el Congreso

Dos diputados almerienses de Vox, Rocío De Meer y Carlos Fernández-Roca, han mostrado su disconformidad “ante la manifiesta dejadez y despreocupación del Gobierno por el campo y por la España rural. Tanto es así, que las subidas del SMI que tendrán lugar con el nuevo Gobierno, traerán consecuencias difícilmente asimilables por el campo”.

 

Vox mantiene que Coag ha manifestado en un comunicado que la subida del Salario Mínimo Interprofesional podría suponer un incremento de más del 50 % de los costes laborales para los agricultores. Esto sucedería al pasar de 967 euros al mes por trabajador en 2018 a 1.455 euros por trabajador al mes en unos años. 


Además, haciendo referencia a la competencia desleal que se realiza con las importaciones masivas de países terceros, “Coag afirma que es imposible competir con legislaciones fiscales y laborales cada vez más estrictas y que sufren las pequeñas y medianas explotaciones agrarias”. 





Temas relacionados

para ti

en destaque