Pacientes de toda la provincia se suman a las protestas de los médicos

Pacientes de toda la provincia se han sumado este miércoles al último de los paros y concentraciones convocados por el Sindicato Médico para exigir al  Gobierno andaluz medidas reales y concretas que corten de raíz la precariedad asistencial en la Atención Primaria. En ellos han participado los médicos “de prácticamente todos los consultorios y centros de salud de la provincia y, además, de los pacientes, también han contado con el apoyo y la participación de enfermeros y otro personal de los centros”, como informa Francisco Cobo, responsable de Atención Primaria del Sindicato Médico de Almería.

La principal petición de los médicos es también la más elemental y la que más ha llevado al apoyo de los pacientes: la de contar con un tiempo mínimo de consulta de diez minutos para cada enfermo. No hay que olvidar que los facultativos llegan a disponer hasta de menos de cinco minutos  en  Andalucía para cada paciente, algo que consideran insostenible, tanto para los enfermos como para los propios profesionales, que se ven obligados en muchos casos a atender a más de 50 o 60 personas cada día.

Aunque la concentración estaba convocada a las 12,00 horas del mediodía, en algunos casos se ha celebrado en otro horario, sobre todo en centros rurales que cuentan con solo un médico y que es itinerante, en los que se han adaptado a sus respectivos horarios.
El sindicato planteó el pasado octubre un calendario de movilizaciones que incluía tres paros. Casualmente, explica Francisco Cobo, esta última ha coincidido con el cambio de Gobierno en Andalucía. “Nuestras demandas seguirán siendo las mismas, y aunque daremos un periodo de cortesía al nuevo Gobierno, seguiremos planteándolas en el futuro si  no se resuelven.

 Además de los cinco minutos por paciente, los médicos piden también que la Junta ponga fin al “maltrato” al que se sienten sometidos, más autonomía en las unidades de gestión clínica,  desterrar los criterios economicistas en la gestión clínica y mejorar las condiciones laborales y salariales en las urgencias de atención primaria, así como medidas reales que den paso a la normalización y mejora asistencial en el sistema de atención primaria de Andalucía, recuperando lo perdido durante los años de crisis y, sobre todo, la calidad del sistema de salud pública.