Ingredientes
- 500 g de carne picada
- 2 huevos
- 2 ajos
- Pimentón dulce
- Mezcla de harina y pan rallado
- Sal
- Pan remojado
- Perejil
Para la salsa
- Aceite de oliva
- 1 cebolla grande cortada en aros
- 1 vaso de vino blanco o caldo
- Patatas fritas
Preparación
Batir un poco los huevos en un bol, añadir los ajos muy picados, la carne, una cucharita pequeña de sal y media cucharita de pimentón. Mezclar suavemente todo con las manos hasta que quede bien mezclado, echar la harina en un plato. Tomar puñados pequeños de carne, elaborando una bola y haciéndola rodar por el plato de harina, que se quede bien impregnada, y se pasa a otro plato. Cuando tengamos algunas hechas, poner la sartén con aceite al fuego a 170ºC. Hay que tener en cuenta que la harina que recubre la albóndiga se va humedeciendo, por lo que no se debe esperar a tenerlas todas preparadas. Cuando estén fritas se prepara la salsa. Poner un poquito de aceite en la cazuela (que cubra el fondo) a fuego medio, y cuando haya calentado añadir los aros de cebolla. Freír unos minutos, tapando la cacerola, hasta que la cebolla esté blanda y con algo de color. Añadir las albóndigas fritas y remover teniendo cuidado de no romperlas. Pasado un minuto echar el vaso de vino o caldo. Tapar y dejar hacer cinco minutos más o menos, que se evapore la mayor parte del líquido. Antes de que se evapore todo el líquido añadir las patatas, pero sin remover: que se queden por encima, con un punto de sal, al gusto. Dejar un minuto más, tapado, y apagar el fuego, dejando que las patatas se reblandezcan con la humedad.