Homenaje a mi hermano Diego

Estaré en deuda contigo, por todo el bien que me has hecho

Diego Fernández Muley

  • Mª Carmen Fernández Muley

Cuando cierro los ojos y pienso en el ayer, siempre vuelvo a mi niñez, por tu enseñanza de vida, hoy te sigo recordando y siempre te recordaré. Por eso hay una estrella que lleva tu nombre DIEGO y cuando miro hacia el cielo, a ella cuento mis penas, cuento mis desasosiegos, también le doy las gracias por alumbrar mis recuerdos, siempre que tengo un problema, rememoro tus consejos. Estaré en deuda contigo, por todo el bien que me has hecho. Fuiste mi estrella en la tierra, ahora en el Firmamento.


Mayo también te recuerda, dejándose florecer, cada flor es un recuerdo y miles hacia tu ser, se enlazan en tu Homenaje, Nunca lloré contigo, sin ti, siempre lloraré.


Quisiera haber podido escapar a ese destino, hoy veo pasar el tiempo, convivo con la tristeza, por momentos de dolor, que me han dejado su huella.


Vives en mis sueños y en mí día a día, en mis alegrías y hasta en mis silencios.


Como olvidar tus abrazos, tus bromas, tus inocentadas. Y es que tengo mil recuerdos que me rebosan el alma. Cada rincón está lleno, de avatares y crianzas. Todas buenas, inmejorables, todas excepto tu marcha. Marchaste joven, muy joven, aún te quedaban andadas, por eso tengo esta pena, que sacude mis entrañas.


Como olvidar tus cuidados, de Hermano mayor, mi Hermano, como olvidar tu sonrisa, que iluminaba mi alma, tu fuerza y tu valentía. Como amabas tú la vida, no conocí quien la amara. Increíble fortaleza, toneladas de pujanza. Perseverante, incansable, guerrero batallador. Muy protector de los suyos, Devastados nos quedamos. Nuestro Paladín marchó.


Otro año más sin ti, el tiempo sigue y no para.Tu eres parte de mi Historia y allá a lo lejos en la cima, paso a paso, cada día, te enviaré mi cariño, mientras me alcance la vida.


Serenata de recuerdos, ascuas de luz y de fuego, brillan desde que marchaste, tu estela están siguiendo. Las mueve el viento salvaje, como ráfagas alborotan, volando como gaviotas, hacia el infinito cielo.


Dice la canción, Nada dura para siempre, excepto la tierra y el cielo y todo el dinero del mundo, no puede comprar el tiempo.