Alcalde de dos municipios enfrentados

El pasado día 28 de febrero falleció en Almería, José Antonio Garcia Acién

José Antonio García Acién

  • José Ruiz Fernández

El pasado día 28 de febrero falleció José Antonio Garcia Acién, político de la Transición, que llegó a gobernar en dos municipio distintos enfrentados por su propio destino: Dalías y El Ejido. Hombre muy vinculado al mundo de la agricultura del poniente almeriense, nació en Dalías el día 11 de marzo de 1944. Cursó los primeros estudios en el Seminario de Almería y los de bachillerato en el Instituto de Enseñanza Media de Almería (hoy, Instituto “Celia Viñas”). 


Desde el año 1965 hasta 1973, trabajó en una empresa de Madrid. Tras su regreso a tierras almerienses, trabajó en la empresa Mercoalmería de El Ejido. Posteriormente, se dedicó a la Agricultura como empresario agrícola, diversificando su dedicación empresarial en el sector del calzado en 1977, y siendo socio fundador de la empresa Gráficas Murgis en El Ejido.


Casado el día 12 de junio de 1969 con Purificación Martín Maldonado en El Ejido, el matrimonio tuvo dos hijos: Óscar y José. Una vez fallecida su esposa, contrajo nuevo matrimonio con Gloria Terrés Lirola el día 11 de marzo de 2002 en Dalías.


Funcionario por oposición, marchó a Bruselas en el año 1984 para trabajar en la embajada española hasta el año 2001, que fue destinado a la embajada de España en Caracas y posteriormente, a la Subdelegación de Gobierno de Almería, donde prestó sus servicios hasta su jubilación. A pesar de ello, sus inquietudes por el saber le llevaron a matricularse en la Facultad de Humanidades de Almería, licenciándose en el año 2016, e iniciando la carrera de Derecho que no llegó a terminar a causa de su muerte.


Trayectoria sindical y política

En el año 1975 se presentó a las últimas Elecciones sindicales del franquismo, resultando elegido Enlace Sindical de su empresa del Sindicato de Actividades Diversas y ejerciendo el cargo de vicepresidente del Sindicato Provincial de Frutos y Productos Hortícolas. En el mes de febrero de 1976 fue nombrado delegado de Sindicatos de Dalías y su zona, ejerciendo el cargo hasta la desaparición de la C.N.S. en el año 1977. A mediados del año 1978 ingresó en la Unión de Centro Democrático (UCD), desempeñando los cargos de presidente de UCD de Dalías y vocal del Comité provincial.


En las Elecciones locales de 3 de abril de 1979 se presentó como cabeza de lista  de UCD por el municipio de Dalías, siendo elegido concejal del Ayuntamiento de Dalías y diputado provincial por la Zona electoral de Berja, y unas semanas más tarde fue nombrado vicepresidente 2º de la Diputación Provincial de Almería.


El cambio de capitalidad

Durante su etapa de concejal se puso en marcha el expediente de cambio de capitalidad del Ayuntamiento de Dalías a la nueva sede de El Ejido, lo que provocó que se produjeran gravísimos incidentes entre los vecinos del municipio de Dalías, que se oponían a dicho cambio, y los residentes en El Ejido. Tras el cese del alcalde socialista Luis Martín Maldonado en el mes de junio de 1980, José Antonio García Acién fue elegido alcalde del municipio Dalías en septiembre de dicho año, cargo que ejerció en un ambiente político hostil, llegando a ser objeto de una moción de censura que logró superar y a sufrir un atentado en sus bienes, siguiendo desempeñando la alcaldía  hasta que se aprobó el expediente de segregación de Dalías y Celín por el Real Decreto núm. 2251/82 del Ministerio de Administración Territorial, de fecha 30 de julio de 1982.


Tras producirse la segregación municipal de los núcleos de Dalías-Celín y El Ejido, el día 11 de septiembre de 1982 fue designado primer alcalde del nuevo municipio de El Ejido, cargo que desempeñó hasta la celebración de las Elecciones locales de 8 de mayo de 1983, no presentándose a la reelección debido a la desaparición del partido de Adolfo Suárez,  Unión de Centro Democrático.


 El día 4 de septiembre de 1997, el Pleno del Ayuntamiento de El Ejido acordó dedicarle la avenida que lleva por nombre “Alcalde García Acién”, en señal de reconocimiento a su persona, calle que fue inaugurada el 11 de septiembre de ese año.


José Antonio García Acién era una persona culta, educada y afable con la que era un placer charlar, como se ha puesto de manifiesto estos días. Amigo de sus amigos y amante de la buena vida (“bon vivant”), los últimos días de su vida los pasó entre su pueblo natal, Dalías, y su piso en la playa del Zapillo de Almería, junto a su esposa Gloria, a la que desde estas líneas le enviamos nuestro más sentido pésame.


D.E.P.