En 1956 llegó a Almería procedente del Marruecos Francés, de su ciudad natal Oujda, un personaje: Ángel López Almansa, hijo de españoles, de profesión sastre que poco tiempo después se conocería popularmente como “El Francés”. Su equipaje más importante: unas tijeras enormes, escuadra, cartabones, algún utensilio más para el oficio, 25 años y unas ganas enormes de trabajar para sacar adelante a su familia.
Sus comienzos y armas: una pequeña sastrería en la calle Murcia con taller de costura propio, un semblante agraciado que no dejaba indiferente a nadie, don de gentes y los más importante de todo: DOS TÍTULOS CONSEGUIDOS EN PARIS, UNO COMO SASTRE DE HOMBRE Y OTRO COMO SASTRE DE MUJER EN TODAS SUS VARIEDADES DE ESTILO Y DISEÑO.
Aquellos títulos eran mirados por quienes pasaba por la puerta o entraban en el pequeño establecimiento como piezas de una exposición de museo, pero pronto el joven sastre de enseñanza francesa, sin alharacas ni pavoneo, empezó a demostrar su valía en el oficio. Durante más de cincuenta años Ángel López “El Francés” vistió a muchas personas y personajes, hombres y mujeres de Almería con acierto y elegancia. Su última sastrería y boutique estuvo en la calle Concepción Arenal. Descanse en paz. Almería 13 de julio de 2019