El Ejido

Tal es así que “los datos de la telefonía móvil revelan que más de un tercio de la población en El Ejido ha hecho dos o más desplazamientos de más de 500 metros al día” durante el Estado de Alarma. Un nivel alto de actividad que ha ido unido a la seguridad en la cadena de distribución, para lo que “ha sido fundamental el ejercicio de trabajo y responsabilidad conjunto”. Todo ello respaldado por el número de contagios que ha sido inferior con respecto a otros territorios.

Góngora ha explicado que se debe a dos factores fundamentales, que serían que “el índice de contagio al inicio de la cuarentena era bajo, era más bajo que en otros lugares, pero también es verdad que ha habido mucha profesionalidad, y que se han adoptado las medidas a nivel de prevención de empresas”.

En este punto ha destacado que “éstas tienen una trayectoria impecable en todo lo que tiene que ver con las normas de calidad y los protocolos implantados en cuestión de salubridad”. Es algo que saben los distribuidores que eligen los productos ejidenses, porque “este rincón de la provincia es punto de referencia de distribución de frutas y hortalizas”.

Es difícil que cualquier otro sistema de cultivo pueda ofrecer a nivel mundial la trazabilidad, la innovación y la calidad que tiene la ejidense"

El alcalde ha destacado que la ejidense es “una agricultura competitiva, y una agricultura que ha sabido evolucionar yo diría que, como ninguna, buscando la eficiencia y el mayor respeto con el medio ambiente” y ha insistido que “es difícil que cualquier otro sistema de cultivo pueda ofrecer a nivel mundial la trazabilidad, la innovación y la calidad que la ejidense”.

Precisamente en este punto recuerda que esa calidad lleva aparejado un incremento de los costes de producción que precisa de una apuesta firme por el principio de preferencia comunitaria a través del que “debemos defender nuestros productos y a nuestros productores”, es decir, contar con un marco legal y las estructuras suficientes que permitan proteger la producción ejidense frente a la de Terceros Países con el fin de garantizar una rentabilidad mínima para el agricultor que le permita seguir produciendo con las mismas cotas de excelencia que hasta ahora.

Precisamente en esa línea es en la que se va a seguir trabajando porque el agricultor, la industria auxiliar, el transporte, manipulado y comercialización han estado en primera línea de batalla, abasteciendo a toda la nación y Europa de frutas y hortalizas de la máxima calidad, por ello todo el reconocimiento por su gran labor, porque han sido verdaderos ‘héroes’, durante la crisis del COVID-19.