- Enrique Hurtado Aracil
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- 10.08.2024
Me he dirigido a ALSA y ,como no se ha dignado contestarme, quiero denunciar la suciedad extraordinaria que lucen los asientos de la ruta Almería/Roquetas de Mar. No exagero si digo que los respaldos y los propios asientos están llenos de mugre reseca, lo que indica que casi nunca lo friegan con agua y jabón ni le pasan una vaporeta. La limpieza de un autobús no reside exclusivamente en barrer y fregar los suelos, pues en los asientos y reposacabezas se van acumulando restos humanos, sudor, grasa y porquería generada por cientos de viajeros. Conozco a personas, y yo mismo también, que, cuando hacemos este viaje, nos cambiamos de ropa y nos duchamos en cuanto llegamos a casa, pues olemos a cuartel infecto. Me parece que ALSA pasa de todo y le importa un pimiento la salubridad de los viajeros. Una pena y una vergüenza que yo denuncio hoy aquí por si sirve de algo.